Tratamiento para el dolor

Amigo lector de Noroeste, creo que el 100% de la población ha sentido un dolor, y este en general es el causante que la calidad de vida se vea afectada, porque usted puede no tener recursos materiales, andar vagando, tener cualquier alteración, pero que no haya dolor usted tiene “alegría”, pero cuando existe cualquier dolor, en ocasiones hasta quiere mejor “morirse”.

Es por esto que desde la antigüedad se ha buscado medicamentos antidolor o acciones que mejoren esta sintomatología.

Algo de historia. Dioscórides fue una figura relevante en su tiempo, pero su renombre se fue acrecentando al trascurrir los siglos, hasta convertirse en el autor de referencia en cuanto a la materia médica del mundo grecorromano: De su vida es muy poco lo que se sabe en la actualidad acerca de la vida de este personaje. Vició a mediados del siglo 1 D.C., sin que se conozcan las fechas de su nacimiento ni de su muerte. Por el prefacio de su obra, conocida genéricamente como materia médica, debemos colocarla por esos años, ya que Lecanio Areio (Ario), a quien está dedicada, fue un médico en tarso, en Cilicia, la misma ciudad en la que naciera San Pablo, quien tomó su primer nombre de Lecanio Baso, cónsul romano en el año 64 D.C.

Siendo así, Dioscórides fue contemporáneo de Plinio “el viejo” y escribió en tiempos en que Nerón era emperador en Roma. Se cree que trabajó con ambos en sus funciones de médico en las legiones romanas.

En efecto, se afirma que su vida fue siempre militar y de su más temprana juventud tuvo un deseo inagotable de conocer la materia médica, y haber recorrido muchas tierras le dio la oportunidad de recabar información de numerosos fármacos provenientes de prácticamente todo el mundo romano. Esto le valió el conocer productos de origen vegetal y animal para manejo de dolor y otras alteraciones en el humano.

Estas sustancias (medicinas), las agrupa en sustancias aromáticas, aceites de origen vegetal y frutos, en un primer grupo. Hierbas amargas y ácidas junto con cereales y drogas de origen animal, en un segundo grupo. Hierbas y sus raíces en el tercero y cuarto; así como vinos y medicamentos de origen mineral en el último.

La información que proporciona es de gran valor, ya que siempre menciona la sinonimia con la cual cada recurso medicinal es conocido en diferentes sitios, describe físicamente y con gran detalle la planta, el animal o mineral, señala las enfermedades para las que suele utilizarse, la manera de prepararla o incluirla en compuestos, la forma de administración, dosificación, las recomendaciones dietéticas que deben tomarse en cuenta y la forma de detectar preparaciones incorrectas o fraudulentas.

Efectos analgésicos. Es cierto que Dioscórides sus preparados no solo los indicaba para dolor, sino para otras alteraciones y enfermedades, pero tomando en cuenta que las diferentes manifestaciones dolorosas eran relacionadas con cambios en la proporción de los humores en todo el cuerpo o en alguna de sus partes y tenían que ver con incrementos del calor, frío o la retención de sustancias o ventosidades en ellos, es explicable que haga mención de los efectos analgésicos (antiálgicos) de muchos de los medicamentos (verbena, majadas con aceite de rosas o con unto de puerco, son recomendadas como remedio excelente para los dolores de la matriz), otros eran preparados con plantas en hervor y se les agregaba miel esto era para quitar cualquier dolor. Otro excelente analgésico es el hiocyamo. De él refiere Dioscórides que mitiga todo tipo de dolores, en colirio sirve para el dolor ocular y de los oídos.

En la actualidad se utilizan diversos analgésicos y desinflamatorios, algunos tienen corticoides, otros están libres de ellos, pero todos están encaminados a disminuir el dolor o desaparecerlo, en ocasiones se recurre a los anestésicos, estos aplicados por el anestesiólogo, aunque en los últimos años existe una subespecialidad de algología que son los especialistas en dolor de difícil control y su seguimiento.