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"Opinión"

"¡A poner la alfombra roja!"

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21/11/2017

    Joel Díaz Fonseca

    jdiaz@noroeste.com

     

    La presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso, Irma Leticia Tirado Sandoval, dio la voz de arranque para que inicie el carnaval que el Legislativo nos ofrece cada año en conjunto con el Ejecutivo.

     

    Declaró el miércoles que a fin de hacer “un análisis a conciencia y minucioso” del Primer informe de labores del Gobernador Quirino Ordaz Coppel, llamarán a comparecer a los funcionarios del Gabinete.

     

    Según declaró, llamarán a los miembros del Gabinete quirinista para que abunden y expliquen datos sobre el documento que resume las acciones del primer año de ejercicio del actual Gobierno estatal, que les fue entregado ese día por el Secretario General de Gobierno, Gonzalo Gómez Flores.

     

    Y pretendiendo ser más “explícita” se aventó todo un rollo que al final seguramente ni ella entendió:

     

    “Se pretenden llevar a cabo aquellas acciones que dan certeza a los sinaloenses en los diversos ejes, como la paz y el equilibrio social, los cuales se deben de conseguir dando respuesta al crecimiento económico y a la aportación que se pueda hacer desde este tipo de acciones y sobre todo al crecimiento de todos los sinaloenses”.

     

    Como dicen en el pueblo, para qué tanto brinco estando el suelo tan parejo. Tantos años -qué digo años, ¡sexenios!- escuchando el mismo compromiso de los diputados de espulgar al Gobernador y a todos sus colaboradores, ¿y todavía esperan que creamos que esta vez será distinto?

     

    Están hechos los unos (los diputados) para los otros (el Gobernador, su séquito y los alcaldes), no pueden morderse, ni siquiera testerearse. Las comparecencias de los funcionarios del Gabinete estatal no son sino una pasarela “hollywoodesca”. Son meras escenografías que ocultan la realidad que vive el estado.

     

    Afirma la presidenta de la Jucopo que “en un régimen democrático y republicano existe la rendición de cuentas entre poderes. Y esto es lo que representa la entrega de un informe, del Poder Ejecutivo al Legislativo”.

     

    ¿Rendición de cuentas? ¿y entre poderes? Esas comparecencias son un simple ritual para dar la impresión de que el Legislativo tiene independencia y la autoridad para llamar a cuentas a los otros poderes. Bueno, esta última la tiene, pero no hace uso de ella, sería un auténtico “harakiri”.

     

    La bancada del PRI cuenta con el apoyo de otras mini bancadas y hacen la mayoría suficiente para sepultar cualquier intento de las bancadas no alineadas por hacer que el Legislativo actúe con la responsabilidad que le es inherente.

     

    ¿En qué quedó todo lo que dijeron Ordaz Coppel y miembros de su Gabinete sobre el desaseo que encontraron al asumir el cargo. En un primer momento el Congreso se mostró decidido a llamar a cuentas a Malova y a sus colaboradores, pero pronto enseñó que es la misma gata solo que revolcadita.

     

    Ocurrió igual que con las caídas de agua en las montañas, las aguas hacen un estruendo al caer, pero terminan corriendo mansa y silenciosamente por la ribera.

     

    El 3 de abril, cumplidos ya tres meses en el cargo, el Gobernador denunció que halló un gobierno desmantelado, sobre todo en el área de seguridad pública, sin embargo, la estridencia de esas declaraciones contrasta con las acciones que se han emprendido para supuestamente castigar a los causantes del desastre y las corruptelas detectadas.

     

    Son de risa las sanciones que se han aplicado hasta ahora a algunos colaboradores de Mario López Valdez. No se advierte, ni en el Ejecutivo ni en el Legislativo, un real interés por sancionar a los causantes del desastre financiero heredado por la pasada administración.

     

    El informe de Ordaz Coppel, entregado el miércoles pasado al Congreso, es magro, sobre todo en lo que respecta a la seguridad pública, un renglón en el que resulta evidentemente reprobado.

     

    El pasado 8 de septiembre se dio a conocer el Índice de Paz México 2017, que reveló que Sinaloa es la tercera entidad menos pacífica, principalmente por su alta tasa en homicidios.

     

    Según el estudio del Instituto para la Economía y la Paz, Sinaloa se ubica en el lugar 30 de 32 estados, ya que en el último año se incrementó en 15 por ciento la tasa de homicidios. Por eso apenitas tocó el tema de la seguridad en su informe.

     

    Apueste usted doble contra sencillo a que la comparecencia del Secretario General de Gobierno y del Secretario de Seguridad Pública ante el Congreso será como un tour por un museo de cera, ah, pero con paso obligado por la alfombra roja.

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