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"Opinión"

"Alcalde contra las cuerdas"

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02/12/2016

    Joel Díaz Fonseca

    Como es su costumbre, el Alcalde de Mazatlán, Carlos Felton González, busca desvirtuar las críticas a su actuación acusando a sus críticos de orquestar ataques en su contra.
     
    Lo hizo en un primer momento contra los regidores Esperanza Kasuga y Humberto Becerra, cuando cuestionaron la adquisición por la vía del arrendamiento de 77 vehículos con un costo de 120 millones de pesos, y demostraron que había un sobreprecio de 47 millones.
     
    También cuando ambos ediles pusieron en evidencia la pretensión de adquirir 30 mil lámparas LED con un costo de 353 millones de pesos, demostrando que había otras opciones con las mismas especificaciones y la misma calidad, a un costo mucho más bajo.
     
    Y cuando el Congreso del Estado se negó a aprobar la solicitud de compra de esas luminarias, Felton González responsabilizó a los regidores mencionados de que por su culpa el proyecto no iría más.
     
    Palabras más, palabras menos, dijo entonces que “por culpa de dos regidores que buscan lucimiento personal el municipio de Mazatlán no se sumará a los municipios del País que ya cuentan con lámparas LED en el alumbrado público”.
     
    Más recientemente, cuando los mismos regidores alertaron sobre la pretensión del Ayuntamiento de buscar un nuevo endeudamiento por 100 millones de pesos para la compra de 50 patrullas y 30 camiones recolectores de basura, el Alcalde, a través de la secretaria del Ayuntamiento, Rosario Torres Noriega, amenazó con demandarlos penalmente, y junto con ellos a los medios de comunicación que han dado difusión a sus declaraciones.
     
    Este jueves, luego de que Observatorio Ciudadano interpuso una denuncia contra el Ayuntamiento por el contrato de arrendamiento de los 77 vehículos, Felton González acusó al abogado David Cristóbal Álvarez, integrante de dicho organismo, de ser el orquestador, a través de Noroeste, de las críticas y denuncias contra la Comuna.
     
    Pese a su larga participación en la vida pública (Diputado federal, Diputado local, y titular en algunas dependencias), Felton González no ha aprendido a dimensionar las cosas ni a entender que es la sociedad quien le demanda claridad y eficiencia en el manejo de las finanzas públicas.
     
    La referida demanda en contra de su Gobierno no la interpuso el abogado Álvarez sino Observatorio Ciudadano, una institución civil que, como advierte en su portal de internet, busca ser un contrapeso ciudadano que active con mayor efectividad la transparencia y la rendición de cuentas en el Gobierno municipal para:
    “Limitar la opacidad en el Gobierno municipal y crear una nueva cultura de transparencia y rendición de cuentas; poner a disposición de los ciudadanos información que sea útil para la toma de decisiones; intervenir e incidir de manera organizada y oportuna en las decisiones que afectan al Municipio de Mazatlán; y difundir los temas y asuntos de interés público y que activen la participación ciudadana.
     
    “Buscamos literalmente”, precisa esta organización de la sociedad civil, “abrir la información pública gubernamental que es propiedad de todos, porque aporta la visión ciudadana a los asuntos públicos y porque es nuestro deber”.
     
    Las diferencias que pueda tener el Alcalde con el abogado Álvarez o con Noroeste no demeritan en nada las críticas, las denuncias y las demandas que se han presentado y puedan presentarse en su contra.
     
    Llega incluso a cuestionar al propio Observatorio Ciudadano porque actúa hasta ahora, y al empresario Rodolfo Madero, presidente del organismo, de quien dijo que no tiene cara para demandarlo.
     
    Habrá que recordarle al Alcalde que todo funcionario público tiene la obligación de rendirle cuentas a la sociedad, desde el momento en que asume el cargo hasta el día en que deba entregarlo, y aún después, cuando se le requiera a través de las instancias acreditadas para ello.
     
    Felton González está actuando como un boxeador acorralado contra las cuerdas y a punto de ser noqueado. El pugilista tira tontazos a diestra y siniestra tratando de tumbar a su oponente, y justo eso es lo que está haciendo ahora el Alcalde con esa sarta de acusaciones infantiles que lanza contra sus críticos. No para de buscar excusas para sus yerros y sus desatinos.
     
    Es obvio por qué nunca concretó la creación del Consejo Ciudadano de Vigilancia y Transparencia, que fue uno de sus principales compromisos de campaña, pues de esa manera quedó con las manos libres para hacer lo que más le conviniera.
     
    La transparencia no ha sido una de las virtudes de Felton González, como lo demuestran estudios de la consultora Aregional e Iniciativa Sinaloa, que ubican al Ayuntamiento de Mazatlán, junto con el de Culiacán, entre los más opacos del País.
     
    Consecuente con su forma de actuar contra quienes lo cuestionan o lo evidencian, el Alcalde de Mazatlán descalificó los estudios que lo reprueban en transparencia con el argumento de que hace años que dejó de creer en las encuestas.
     
    Independientemente de si valida o no los estudios que lo califican reprobatoriamente, ¿tiene o no derecho la sociedad de Mazatlán a exigir una puntual rendición de cuentas? Por supuesto que sí, aunque el Alcalde se retuerza de coraje.
     

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