Como dicen en los pleitos callejeros “¿es todo lo que traes?”.
El comentario porque ayer la PGR anunció recompensas por información veraz que lleve a la captura de los asesinos de seis periodistas, entre ellos el del sinaloense Javier Valdez.
La Procuraduría “sacó” la cartera con 9 millones de pesos en total, 1.5 millones por cada caso.
El intento muestra la desesperación de las autoridades y la imposibilidad de ofrecer resultados de inteligencia, de una verdadera investigación sobre el paradero de los responsables de los crímenes.
Y las reacciones no se hicieron esperar, algunos diputados federales calificaron de pésima señal el ofrecimiento de recompensas de la PGR.
De acuerdo al portal de La Jornada en línea, Macedonio Tamez, secretario de la comisión especial de Vigilancia y Apoyo a los Periodistas de México de la Cámara de Diputados, calificó de postura inmoral y antiética la de la PGR, y consideró que el ofrecimiento de recompensas es el último eslabón de la “imposibilidad de la autoridad por resolver casos de violencia contra los distintos actores sociales en México”.
Una acción desesperada
Para Alejandro Sicairos, el ofrecimiento de recompensas de la PGR refleja la ausencia de avances en las investigaciones.
Dijo que este tipo de medidas de la PGR abonan a la idea de que no se tienen avances importantes en las carpetas de investigación abiertas por la Fiscalía General de Sinaloa y la Fiscalía Especial de Atención a Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión.
El presidente de la Asociación de Periodistas y Comunicadores 7 de Junio añadió que la recompensa que ofrece la Procuraduría General de la República es una acción desesperada y desafortunada que indica que los periodistas y la sociedad tienen razón al afirmar que el caso de Valdez se encamina hacia la impunidad.
La pregunta aquí es, ¿el dinero ofrecido será suficiente para sacar a los sapos de los agujeros y comiencen a delatar?
O como dijo alguien por ahí: “algunos sólo necesitan dinero para ser honestos”.
El tiro por la culata
Vaya “exhibida”, la que se dieron ayer los diputados del PRI en la 62 Legislatura.
En un acto carente de todo oficio político, la bancada tricolor agendó en el orden del día, “por sus pistolas”, sin tomar consenso con la oposición, la primera lectura a una iniciativa del Gobernador Quirino Ordaz Coppel “para reducir los tiempos de campaña y el financiamiento a partidos políticos”.
Todo suena muuuuy bonito, pero resulta que este documento apenas fue presentado a los medios por el Mandatario, el lunes 12 al mediodía.
Por cierto, esa conferencia fue convocada, de última hora, por su equipo de prensa.
¿Qué tan desesperado andará Quirino, frente a la opinión adversa y generalizada de la sociedad hacia su gestión, que se ordenó a Irma Tirado Sandoval, líder de la mayoría priista, a dar un “madruguete” a la Cámara?
Al final les salió el “tiro por la culata”, al tratar de imponer una primera lectura de esta iniciativa lo único que consiguieron fue el rechazo de la mayoría.
La querían votar hoy
Pues en esta intentona no sólo atropellaron la Ley Orgánica, ignorando los procesos parlamentarios y a comisiones como las de Protocolo, sino que la intención era convocar a una sesión extraordinaria, para hoy, y ¡votar el dictamen!
Esto en la lógica que de no hacerlo, no podría aplicarse en el próximo proceso electoral de 2018, debido a que la legislación prohíbe modificaciones a las normas 90 días antes de que se convoque a elecciones.
Fue tan burda la desfachatez de los “empleados”, ¡perdón!, de los diputados de Quirino, que ninguno hallaba dónde meter la cabeza.
Sin dar un sólo argumento ni razón, tuvieron que dar una penosísima “reculada”.
¿No que muy autónomos e independientes?
Dudas bien fundadas
Con la respuesta del Presidente Municipal de Culiacán, Jesús Valdés Palazuelos, y el Secretario fe Seguridad Pública local, Óscar Guinto Marmolejo, ahora tenemos más dudas que tranquilidad.
Ahora le echan la culpa a la Federación de ponerle trabas a la entrega de recursos federales para la seguridad pública, la única apuesta que hemos visto que trae nuestro risueño Alcalde.
Esperábamos que adquirieran un montón de patrullas, motos, uno que otro tanque y armar hasta los dientes a nuestros pocos agentes del orden.
Pero lo adelantado por el Alcalde lo confirmó el Secretario de Seguridad: “hemos tenido problemas para bajar los recursos”.
Las dudas están fundadas ahora en que, además de tomarle la palabra a Chuy Valdés, cuando dijo que no es experto en seguridad, ahora vemos que tampoco lo es en bajar recursos.
Y ahora, ¿quién podrá ayudarnos?
Nada más esperemos que no vaya a quedar a deber en la rehabilitación de los parques públicos, el último cartucho que le queda.
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