"Blindaje de un mes a Mazatlán. Es mucho lo que está en juego"
Desde hoy, y durante un mes, Mazatlán se convertirá en una fortaleza militar y policiaca para garantizar la seguridad de los asistentes a tres retos cuya secuencia preocupa. Semana Santa, la Semana de la Moto y el Tianguis Turístico 2018 son asuntos de seguridad estatal y nacional porque de su buen desarrollo depende el resurgimiento o caída de este destino de playa.
A cargo del Secretario de Seguridad Pública, el General de Brigada Genaro Robles Casilla, en el sur será calado un sistema que se considera impenetrable por la delincuencia, con patrullajes, retenes, trabajo de inteligencia, videovigilancia, 800 militares y alrededor de mil policías estatales y municipales. Es la hora crucial para los militares al frente de la seguridad pública de Sinaloa.
Este viernes 23 de marzo será cantada la cuenta regresiva para la mayor prueba de hospitalidad y seguridad que haya enfrentado Mazatlán como destino de playa. Al empezar a correr el mes determinante para afinar la realización del Tianguis Turístico quedó listo el blindaje de mar, aire y tierra que estará a cargo de alrededor de 800 militares y mil 200 policías estatales y municipales.
A solicitud de Quirino Ordaz Coppel, la Secretaría de Defensa Nacional y la Secretaría de Seguridad Pública federal se mantendrán en coordinación con el Gobierno de Sinaloa reforzando la protección al evento internacional. Aparte de la intervención discreta de elementos de las dos instituciones, la SEDENA y SSP estarán a la expectativa para atender problemas mayores.
La prioridad número uno es la seguridad de los visitantes de 88 países que asistirán con el objetivo de hacer citas de negocios en la llamada industria sin chimeneas, sector que en México representa el 8.7 del Producto Interno Bruto y que es el tercer generador de divisas al aportar cerca de 20 mil millones de dólares al año.
Pero más allá del impacto económico positivo, el Tianguis Turístico significa el examen de posgrado respecto a la capacidad que tenga Sinaloa para garantizar la seguridad de los visitantes, pues gran parte de la prensa y empresarios internacionales llegarán con el estigma de la violencia derivado de que la entidad sede también es cuna de los principales narcotraficantes del País.
Las inversiones llegarán a Mazatlán, durante o después del Tianguis, solo si los hombres y mujeres del capital sienten las garantías suficientes para que sus negocios estén seguros. A muchos de los empresarios europeos, asiáticos y norteamericanos se les ha recomendado máxima precaución pues Sinaloa, se les ha dicho, es foco de peligro.
La versión 42 del Tianguis Turístico se prevé como el cierre de negocios sin precedentes, superando la que en 2017 se realizó en Acapulco, la sede original. La meta es convencer a los extranjeros que visiten México, más allá de los 35 millones que ya lo hacen, a la par de reforzar el flujo de turistas nacionales que ocupan cuatro de cada cinco habitaciones en hoteles.
Lo otro está bajo control. A través de un programa infinitamente verificado Mazatlán se alista para subyugar a promotores turísticos de todos los continentes. La fiesta empieza este fin de semana y acaba el 19 de abril próximo por esta sucesión de fechas que coloca a la Perla del Pacífico en su mejor y mayor encrucijada de la era moderna.
Re-verso
Monos bichis y venadito,
Alistan ropa de gala,
Y Mazatlán acicala,
Su plumaje de angelito.
Propuesta desaforada
Por la buena imagen del edén marismeño deberían esconder, por lo menos de aquí al Tianguis Turístico, al priista Fernando Pucheta y al panista Alejandro Higuera para evitar que con alguna ocurrencia de esas que les son típicas atrofien la percepción que se llevarán los visitantes. Bueno, no tanto, con que se mantengan callados es suficiente.
Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.
