"Convenencieros"

¿Por qué los diputados del PRI cambiaron de opinión?

Primero, en enero suspenden la Cuenta Pública de Malova del primer semestre de 2016 y, seis meses después, la aprueban.

El mismo día dan su voto favorable, y sin chistar, a la correspondiente del segundo semestre de 2012. Malova, perdonado.

¿Qué pasó en esos seis meses? ¿Por qué el cambio de línea? ¿Por qué tirar a la basura los bonos que ganaron al tomar una decisión histórica al negar el aval al mal manejo de los recursos del ex Gobernador?

Sólo hay una explicación y ésta puede encontrarse en el contexto de las elecciones que viene el año próximo.

Buena parte de los legisladores priistas fueron apuntalados por el malovismo, y no dudamos que busquen o la reelección o la candidatura a sus respectivas alcaldías.

Por otro lado, las campañas requieren dinero y movilización, y para repartir ambas, Mario López Valdez y Gerardo Vargas Landeros se pintan solos para ello. Y súmele que el actual Gobernador Quirino Ordaz Coppel no ha podido o no ha querido tener las riendas del priismo local.

Para decirlo en palabras de Arturo Santamaría, colaborador de Noroeste:

“Con la reforma al artículo 37 y la aprobación de las cuentas públicas de 2016 de Malova, el año de Hidalgo, el malovismo se erige como la principal fuerza política dentro del PRI y del conjunto de los partidos en Sinaloa. Y, de paso, demuestra que no hay quirinismo o que lo poco que hay de éste no tiene suficiente poder para cumplir lo que prometió y fortalecer el Estado de Derecho en la entidad”.

Así que todos estos elementos se orientan a una interpretación: los diputados del PRI (y también del PAS) avalaron el manejo irregular del malovismo con fines estrictamente privados, con la búsqueda de nuevos puestos en sus mentes.

¿O de qué otra manera puede entenderse?

Discurso desesperado

Apenas lleva seis meses en el cargo y parece que Quirino no puede más con el puesto de Gobernador.

Ignoramos qué sucede en su día a día y bajo cuáles presiones está, pero hay dos rasgos del discurso oficial que ya descubren el desgaste.

Uno es la insistencia sobre el tema de obra pública. Si le preguntan del clima, responde de las obras que está haciendo su administración. Si le preguntan sobre seguridad contesta con el asunto de la construcción Badiraguato-Parral, si lo abordan sobre política, saca el asunto de las obras públicas. Lo mismo, lo mismo que repetía y presumía Malova: las obras públicas que hoy están bajo sospecha.

El otro indicio de desgaste lo vimos hace unas semanas, cuando el discurso oficial comenzó a presumir que los homicidios descendieron de un mes a otro.

Y de nuevo, acudiendo a una artimaña malovista, el quirinismo comenzó a interpretar la estadística mañosamente pues decía que con relación a mayo, en junio bajó la cifra de asesinatos.

Pues sí, pero con la distinción de que este mayo fue el más violento en los últimos 20 años. Claro que tendrían que ser menos. Y fueron sólo 21 casos abajo.

Estadísticamente no es correcta esta comparación. La prudencia técnica y política marca que habría que espera tres meses para confirmar si se mantiene la tendencia. Pero ante el desespero, comenzó a mostrarse como logro esta ligera variación a la baja.

La realidad de las cosas es que los homicidios aumentaron 72 por ciento de junio del año pasado al actual. Y por semestre, el de Quirino (enero-junio de 2017) arrojó 67.5 por ciento más homicidios que el mismo periodo del año anterior.

Entonces, ¿cuál disminución?

Lo dicho, hay desespero en el mazatleco.

Lecciones para ciudadanos

Como ya se sabe, la sesión del Congreso del jueves estuvo candente, ya que a ella acudieron ciudadanos para reclamar a los diputados la reforma al artículo 37, la cual establece que las cuentas públicas de gobierno ya no serán discutidas, aprobadas o suspendidas por el pleno, es decir, por los 40 diputados.

Ahora, será la Comisión de Fiscalización la que dé su aval al manejo de millones de pesos públicos. Es decir, será una decisión de minoría, muy alejada de la naturaleza deliberativa del parlamento.

Finalmente, el PRI y el PAS se salieron con la suya a pesar de los reclamos y exigencias de los ciudadanos que ahora piden a los ayuntamientos que frenen esa reforma, pues para que sea publicada, se requiere de la autorización de la mayoría de las administraciones municipales.

Ahora que el polvo del jueves se asentó, queremos aprovechar para hacerle una recomendación a los ciudadanos. El cambio de las instituciones no surge de su detonación.

Cualquier acto vandálico, protagonista o que solamente abone al circo legislativo demerita la causa ciudadana, no la enriquece. Quizá las ocurrencias de algunos hasta diviertan en su momento, pero rebajándose al nivel de los diputados priistas y pasistas, en este caso, devalúan la conciencia y la lucha ciudadana.

Se vale criticar a los que manejan las instituciones, lo que no se vale es confundir a los políticos con ellas.