"Eclipse solar durante el embarazo: ¿tu bendición está en peligro?"

El eclipse parcial de Sol del próximo lunes 21 de agosto será un fenómeno astronómico muy anhelado, tanto por los aficionados a los astros, como por los chamanes que ofrecen protección para los que están por nacer.

A pesar de estar en pleno siglo XXI, algunas personas tienen la creencia de que aquellas mujeres embarazadas que se exponen a un eclipse pueden ocasionar que su bebé sufra deformidades faciales o marcas de nacimiento.

Esto se remonta a una leyenda Azteca de los eclipses lunares. El nombre del eclipse lunar, “metzqualoniliztli”, significa “comerse la luna”; ellos creían que la luna estaba siendo comida en grandes mordidas sucesivas.

También tenían la creencia de que la embarazada que se expone a un eclipse lunar dará a luz a un bebé con el labio leporino (tochicihuiztli, “la marca del conejo”). Para proteger al bebé de esta suerte, la embarazada colocaba un cuchillo de obsidiana en su vientre.

A pesar de que esta superstición es solo para los eclipses lunares, la sociedad actual la incorporó a los mitos de los eclipses solares.

No existe ninguna correlación entre el labio leporino y la exposición a un eclipse solar. Dicho sea de paso, exponerse a un eclipse solar no representa ningún riesgo a la salud.

Si una mujer con bendición gestando en el vientre desea disfrutar de este milagro natural, lo único que debe de tomar en cuenta es no mirar directamente al sol. En caso de no poder resistir la tentación, asegúrense de observar el eclipse con filtros para soldar número 14; NO utilizar lentes de sol, binoculares, cámaras fotográficas o de video, vidrios ahumados o polarizados.

Las mujeres embarazadas tienen demasiadas cosas por las cuales preocuparse, un eclipse solar no debería de ser una de ellas.