@rodolfodiazf
El 19 de mayo de 1895 falleció el apóstol cubano José Martí, quien legó casi todo su patrimonio filosófico, literario y libertario en las páginas de los periódicos.
Para honrar su memoria, y la de Javier Valdez Cárdenas, transcribiremos algunos de sus pensamientos sobre la esencia de un periódico y del periodismo en general.
“El periódico es una espada y su empuñadura la razón. Solo deben esgrimirla los buenos, y no ha de ser para el exterminio de los hombres, sino para el triunfo necesario sobre los que se oponen a su libertad y progreso.
“Debe desobedecer los apetitos del bien personal, y atender imparcialmente al bien público. Debe ser coqueto para seducir, catedrático para explicar, filósofo para mejorar, pilluelo para penetrar, guerrero para combatir. Debe ser útil, sano, elegante, oportuno, saliente. En cada artículo debe verse la mano enguantada que lo escribe, y los labios sin mancha que lo dictan. No hay cetro mejor que un buen periódico”.
Martí aborrecía a los periodistas que se vendían al mejor postor. “Odio la pluma que no vale para clavar la verdad en los corazones y sirve para que los hombres defiendan lo contrario de lo que les manda la verdadera conciencia, que está en el honor, y nunca fuera de él”.
El periodista, como testigo de la historia, debe reflejar en sus escritos lo que ha visto, no lo que dicten turbios intereses editoriales. El periodista es vigía y centinela de la sociedad. “No hay tormento mayor que escribir contra el alma, o sin ella… ¿Qué habré escrito sin sangrar, ni pintado sin haberlo visto antes con mis ojos?.. No merece escribir para los hombres, quien no sabe amarlos… La prensa es el can guardador de la casa propia”.
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