|
"A propósito de..."

"La riqueza de la sierra sinaloense y... los desplazados (Parte 1)"

""

    arturo.lizarraga@hotmail.com

     

     

    La riqueza del municipio de Concordia que hemos mencionado en colaboraciones anteriores es similar a la que cuentan los demás municipios con población en la sierra, como Rosario, San Ignacio, Cosalá, Badiraguato, Sinaloa, Choix. En todos existen recursos forestales, tierras fértiles, ríos y arroyos, panoramas encantadores y climas que varían de frescos en primavera-verano a fríos en otoño-invierno. Otras características comparten esos municipios: todos son atenazados por la violencia galopante de los narcotraficantes por apropiarse de rutas de trasiego -según versión oficial- y, en consecuencia, en todos esos la cantidad de Desplazados Internos por la Fuerza (DIF) está dejando localidades vacías.

     

     

    La cifra expuesta ante los medios de casi 37 mil personas desplazadas es apenas una muestra que no representa lo que realmente está sucediendo en los altos sinaloenses. Otra característica común tienen tales municipios: su subsuelo es rico en yacimientos minerales cuyo valor, representado en pesos, alcanza cifras multimillonarias.

     

     

    Como bien se sabe, desde la llegada de los españoles la explotación de los minerales preciosos -oro y plata- fue sobresaliente, pues la avidez de la economía (es sólo un eufemismo) provocaba que se horadaran la naturaleza y las culturas locales, así como se sacrificaran miles de vidas humanas. En Sinaloa esa gran explotación fue ininterrumpida hasta las primeras décadas del Siglo 20, cuando entró en declive, sin desaparecer, debido a diversos factores que no viene al caso mencionar. El asunto es que la minería volvió a activarse con nuevas técnicas de obtención de metales hasta entrado el Siglo 21, con la llegada de empresas, tanto nacionales como extranjeras entre las que destacan canadienses, estadounidenses, australianas y chinas, como lo consigna detalladamente el Gobierno federal.

     

     

    Según el Panorama Minero del Estado de Sinaloa, 2016, publicado por la Secretaría de la Economía, en Sinaloa esta actividad ha despuntado de manera acelerada en años recientes: “actualmente la minería en el estado de Sinaloa, muestra una tendencia a la alta, ya que presenta manifestaciones de mineralización prácticamente en toda la extensión de su territorio” (p.2). La importancia de la actividad ha venido remontando posiciones en el ranking nacional, pues según este mismo documento “tomando en cuenta las características geológico-mineras, en relación a los tipos de yacimientos minerales, que se encuentran presentes en el estado, así como a la capacidad de las plantas de beneficio instaladas; el estado ocupó en el año 2015 el séptimo lugar a nivel nacional como productor de oro, el octavo en fierro y plomo, noveno en zinc, decimo en cobre, décimo cuarto en plata, entre los minerales metálicos, mientras que entre los no metálicos ocupó el primer lugar en la producción de talco, tercero en andesita, cuarto en riolita, octavo en basalto y sal, noveno en agregados pétreos (mineral para construcción) y décimo noveno en arcillas (ídem: 2. Se respeta la redacción original). Y para tener una mayor visión de lo que significa la minería, es importante resaltar que ésta ocupa el quinto lugar entre las actividades económicas a nivel nacional.

     

     

    El crecimiento de la actividad es claro a partir del año 2011, mismo que tomamos como año base para ilustrar el hecho con un botón de muestra: el oro. En ese año el volumen extraído del subsuelo sinaloense fue de 110 toneladas y media, pero para el año 2015 el volumen del oro extraído ascendió hasta alcanzar la cifra de 3 mil 28.30 toneladas, según el documento que estamos refiriendo (Panorama Minero del estado de Sinaloa, p.5).

    Bien, ¿de cuánto dinero contante y sonante estamos hablando? Retomando la información oficial que proporciona la Secretaría de Economía, nos damos cuenta por qué tanto interés de las empresas extranjeras por explotar los yacimientos mineros a lo largo y ancho de la serranía: si en el año base (2011) el valor de la extracción de oro era de 69 millones 911 mil 874 pesos, para el año final (2015), el monto ascendió a mil 788 millones 172 mil 341.64 en moneda nacional (ídem, p. 6).

     

     

    Considerando tan solo ese botón de oro como muestra, es fácilmente comprensible no sólo por qué en la sierra de nuestro estado están proliferando las plantas ya en activo, sino por qué existen más y más proyectos de exploración de los recurso. Porque como dice el documento referido, “actualmente la minería en el estado de Sinaloa muestra una tendencia a la alta, ya que presenta manifestaciones de mineralización prácticamente en toda la extensión de su territorio” (ídem: 2). En todo el territorio, sí, pero básicamente en los municipios que hemos mencionado arriba, “pues si bien existen distritos mineros en donde la minería se ha desarrollado a gran escala, parte del estado permanece poco explorada sobre todo hacia la parte serrana” (ídem, p. 2).

     

     

    Pues resulta que en esa parte serrana es justo donde operan, desde los años 40, los grupos que se dedican a la siembra y cosecha de amapola y mariguana, y también, como dijimos, es ahí donde se encuentran las localidades de origen de los desplazados. Así las cosas.

     

     

     

    El autor es doctor en Ciencias Sociales, catedrático de la UAS y miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Especialista en temas de migración.

    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!