"Los diputados y diputadas aprobaron las cuentas públicas ¿Y?"

Mucho se ha escrito y hablado sobre la aprobación de las cuentas públicas del Gobierno de Malova y del Gobierno de Felton (entre otros) y sobre las reformas a la Constitución local, para que ese tema ya no se discuta en el pleno del Congreso del Estado.

Para empezar, con todo y esas reformas, las cuentas públicas serán discutidas por los diputados y diputadas, sin tanto cuento, pero discutidas y hasta dos veces, pero de eso me ocuparé en otra colaboración.  

Ahora me quiero ocupar de cuáles son las consecuencias de que hayan aprobado las cuentas públicas con todo y las “observaciones” que hizo la Auditoría Superior del Estado (ASE). 

Pero primero, ¿sabe cuál fue una de las principales explicaciones que dieron nuestros flamantes diputados y diputadas del PRI y PAS para aprobarlas? 

Pues que, si no lo hacían, el Gobierno federal no iba a darle dinero al Gobierno del Estado ni a los municipios “observados”.

Así como lo lee. En otras palabras, las aprobaron, con todo y “observaciones”, para que le siguieran dando dinero al Gobierno del Estado y al Ayuntamiento local. Les valió si los anteriores se lo robaron, lo importante es que los actuales tengan dinero para gastar. 

Aprobar las cuentas públicas no significa que Malova y Felton ya la libraron. Con o sin observaciones de la ASE, si se robaron el dinero público y hay pruebas de eso, cualquier ONG puede presentar las denuncias penales o de responsabilidades administrativas correspondientes. La pregunta es qué ONG lo hará. Obviamente que si hay observaciones no corregidas, la ASE está obligada a presentar sus denuncias. 

¿Y qué se puede hacer contra los diputados y diputadas del PRI y PAS que aprobaron las cuentas públicas a pesar de las observaciones de la ASE?

Para empezar, no votar por ellos o ellas, si tienen el cinismo de tratar de reelegirse en 2018 y, por otro lado, hay que llevarlos a los tribunales, y demandarlos por responsabilidad administrativa y política (juicio político). De nuevo, cualquier ONG puede hacer lo segundo, pero ¿Cuál se atreverá?

Si queremos que las cosas cambien, los ciudadanos y sobre todo las ONG de mayor peso y respetabilidad, deben empezar a utilizar bien y contundentemente las opciones legales que existen para castigar a los servidores públicos y políticos profesionales que no cumplen con lo que se espera de ellos y solo aprovechan sus puestos para sus propios intereses y los de sus partidos (usted y yo les valemos). 

Los diputados y diputadas aprobaron las cuentas públicas simple y sencillamente porque apuestan a que nos les va a pasar nada. Confían en que nadie inicie acciones legales en su contra y ¿sabe qué? Puede que tengan razón. La impunidad es la madre de la corrupción. Queremos acabar con la corrupción, acabemos con la impunidad.