Esta noche sabremos quienes son los aspirantes semifinalistas a Fiscal General de Sinaloa.
La Coordinación General del Consejo Estatal de Seguridad Pública, integrada por 18 ciudadanos, tomará hoy una decisión y, de entre los 17 candidatos, elegirá a cinco idóneos.
Esa quinteta será enviada al Gobernador Quirino Ordaz Coppel, el cual a su vez elegirá a tres de esos cinco para proponerlos ante el Congreso del Estado.
Finalmente los diputados votarán por uno de esos tres, para que se convierta en el primer Fiscal General de Sinaloa.
Características de los idóneos
De entrada, la ley que da origen a la Fiscalía General nació con un problema que aquí hemos insistido que es de suma gravedad: por años se propugnó por una Fiscalía autónoma del Gobernador en turno y la de Sinaloa no lo será.
Tan simple como el hecho de que Ordaz Coppel mandará una terna al Congreso para que de ahí salga el nuevo Fiscal.
Eso ya no es autonomía, pudo realizarse el proceso sin intervención del Gobernador, como se hace en la elección del Auditor Superior del Estado y de los consejeros estatales de Acceso a la Información..., aunque también ahí hay cuotas políticas.
En fin, si ya nació con fallas de origen, los consejeros del CESP tienen que ponerse bien truchas ahora para no cargar con el costo político, o dicho de otra manera, para que no se “quemen”.
Primero tienen que cuidar que en la quinteta no vaya alguien señalado como el de la “línea”.
Segundo, que tampoco vayan otros que ya tuvieron su oportunidad en la persecución de los delitos y que, por lo tanto, son responsables de la alta impunidad que hoy se sufre.
Tercero, que tenga la entereza para ser independiente. ¡Está café!
¿Tendrán el tino y el valor?, los consejeros del CESP. ¿Aguantarán los telefonazos? ¡Vaya! ¿Hay entre los 17 aspirantes alguien con esas características?
Vaya lío. Ya prevemos que esa quinteta convencerá a pocos.
Origen de las dudas
No es que seamos negativos o escépticos. Partimos de un dato concreto. Los consejeros del CESP no establecieron en la convocatoria que fuera obligatorio que los aspirantes a Fiscal General hicieran públicas sus declaraciones patrimoniales, fiscal y de intereses, conocidas como 3de3.
De ninguno de los 17 sabemos, como ciudadanos, a cuánto asciende su riqueza, si cumplen con sus impuestos y con quién tienen intereses políticos o empresariales.
Básicamente lo dejaron para después y a discreción de quien sea el elegido, es decir, quien sea nombrado por el Congreso presentará su 3de3... si quiere. Si no, no.
¿Pos así, cómo?
Y las mismas por la ASE
Parece que las líneas ya están corriendo en la elección del Auditor Superior del Estado.
Nos cuentan que en el mundo empresarial ya se habla de que la carta de Quirino Ordaz Coppel para la ASE es, en realidad, una recomendación de el empresario atunero, Eduvigildo “Leovy” Carranza.
Y esa carta es Víctor López González.
¿Será?
Detrás del oropel
La gran organización que implica un evento como el Carnaval de Mazatlán, la grandeza de su tradición y la felicidad que regala a todo un pueblo, no puede ocultar la miseria en la que vivimos.
Ni la fiesta que recorre la Avenida del Mar, ni el aparatoso operativo de seguridad logran evitar la violencia y la pobreza de un puerto desigual.
La muerte siempre acecha entre la fiesta, siempre presente, asoma donde menos se le espera, pero nunca falta a su cita.
En esta ocasión fueron un joven y una bebé los protagonistas de la tragedia.
El joven de apenas 17 años de edad deja una profunda historia de dolor en su familia y sus amigos.
Atacado a navajazos para robarle una gorra, mientras disfrutaba del desfile, una historia que sorprende más por la banalidad del botín.
La bebé muerta también cerca de la zona de Carnaval tenía apenas 21 días de nacida, sin embargo, la necesidad de buscarse la vida vendiendo algo a las miles de personas que se reúnen en Carnaval, llevó a sus padres a sacarla de su hogar y llevarla con ellos.
Nunca sabremos si su destino hubiera sido diferente si sus padres no hubieran tenido la necesidad de trabajar de noche en la fiesta, lo que si sabemos es el profundo dolor que deja a su familia.
Inteligencia
politizada
Los servicios de inteligencia en Sinaloa fueron encargados a personas sin el menor conocimiento del tema.
Y no es que queramos que los encargados sean expertos en el espionaje político, al contrario, este oficio requiere de tacto, sobre todo para conocer las entrañas de los grupos criminales, pero en vez de eso, la “inteligencia” del estado se utiliza en la mayoría de los casos para tener aplacados a los disidentes, a quienes contradicen al sistema.
Si la inteligencia se utilizara para contrarrestar la violencia, los escenarios en la entidad fueran otros.
Malecón es columna
institucional
de esta casa editorial.
malecon@noroeste.com
Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.
