"Tapa el PRI la gran cloaca. ¿Y el fraude contra Salud?"

Con marcado descaro y con el Diputado José Menchaca haciendo el trabajo rudo, la mayoría priista en el Congreso del Estado trazó ayer las rutas de impunidad por las que transitarán las cuentas chuecas del ex Gobernador Mario López Valdez. Sellar el albañal, así resulte salpicado el mismo Quirino Ordaz Coppel, es la consigna.

Al aprobarle a Malova la cuenta pública del primer semestre de 2016, misma que había rechazado y que originó que las instancias de auditoría abrieran procedimientos de investigación y sanción, la mayoría del PRI en la Comisión de Fiscalización optó por ahogarse en la enorme cloaca de la corrupción.

Y metió a ese mismo chiquero aquel discurso que el Gobernador Ordaz Coppel pronunció al asumir el cargo en el cual comprometió su palabra y energía en castigar la pudrición en el ejercicio de cargos públicos. He aquí el punto de partida de la gran burla a la ley y a los sinaloenses.

El perdón a Malova y malovistas se vio venir desde que se empezó a apagar la llamarada que el Gobierno de Ordaz Coppel encendió hace tres meses, al revelar la cuantía y prácticas sorprendentes del desfalco cometido en la Secretaría de Salud por Ernesto Echeverría Aispuro y compinches.

Fue evidente el viraje a la exención de culpas desde que el balance sobre las cuentas irregulares del Gobierno de Malova omitió los informes fundados y detallados del turbio manejo de recursos públicos en Salud.

Se generó la percepción de que la Secretaría de Transparencia y Rendición de Cuentas y la Auditoría Superior del Estado tenían coartada para que el escándalo que socialmente es inclemente para Echeverría y cómplices, tenga como desenlace lo mismo que ocurrió ayer con la cuenta pública de Malova.

En el informe que el 10 de julio dio a conocer María Guadalupe Yan Rubio sobre el acumulado de 2,164 millones de pesos en malos manejos encontrados a la administración malovista, de enero de 2011 a diciembre de 2016, extrañamente la Secretaría de Salud no apareció entre las dependencias auditadas, aun cuando es de las más cuestionadas en cuanto a daños al erario.

Tampoco aparece el caso Salud en el Informe Ejecutivo de Resultados de la Cuenta Pública, correspondiente al segundo semestre de 2016, misma que la Auditoría Superior del Estado entregó a la 62 Legislatura estatal. Sí fueron fiscalizadas las Secretarías de Finanzas, Desarrollo Económico, Educación, Obras Públicas y Turismo.

¿Qué pasó con aquel desastre financiero, de más de 2 mil millones de pesos, que dijo haber encontrado el actual Secretario de Salud, Alfredo Román Messina? ¿Cómo aprobar la cuenta malovista después de que medios locales como Noroeste y otros con resonancia nacional e internacional evidenciaron la red de negocios que Echeverría Aispuro hizo con su socio Javier Salido Artola?

Todo el montaje de la fingida lucha anticorrupción cayó ayer. La Comisión de Fiscalización y la deplorable labor tapacloacas del Diputado Menchaca trajeron de vuelta el hedor de la impunidad, tan pestilente como la corrupción misma. Intacta, prevaleció la costumbre de dejar hacer y dejar pasar a servidores públicos deshonestos, semilla y árbol de la corrupción.

Re-verso

Una vez sellada la cloaca,

Que el clan Echeverría,

Junto a Malova se ría,

Del "chiste" de Menchaca.

Golpe final

Hoy el PRI, aliado con el Partido Sinaloense, hará el resto para llevar a lo oscurito las futuras revisiones de las cuentas públicas. Ayer se alistaba el dúo traidor para consumar la reforma a los artículos 37 y 43 de la Constitución para que la mugre de los gobernantes se lave en secreto.

alexsicairos@hotmail.com