"Entregan a familiares restos de las enfermeras de Mazatlán, Érika y Cindy"

En el Fraccionamiento Valle Bonito y en el Fraccionamiento Caracol, las casas enmudecen...

Este medio día lucen ajenas, distantes, calladas...

Los vecinos parecen estar replegados al interior, agobiados por la impresión de un hecho que, aunque ya se aclaró, aún no escribe su capítulo final, el desenlace de la justicia para las enfermeras Cindy y Érika.

El vicefiscal de la zona sur, Cruz Alejandro Flores Salazar, entregó ayer las restos mortuorios de las enfermeras del IMSS, caídas en desgracia tras una noche que inició como diversión.

Y fueron las madres de las víctimas quienes las recibieron.

Ayer, Cindy fue velada en casa de sus papás, en el Fraccinamiento Valle Bonito.

El crimen de las enfermeras enlutó a dos familias, cimbró la capacidad de asombro de los ciudadanos, que se movieron por las plataformas de la información para exigir justicia y pedir información de su paradero.

Pruebas avanzadas de ADN confirmaron los restos de las enfermeras Cindy, de 31 años; de Érika, de 30 años; y del joven José Antonio, de 24 años. Los tres fueron entregados ayer a sus familias.

El Vicefiscal de la zona sur, Cruz Flores Salazar, confirmó que los peritos pudieron precisar, con pruebas científicas los restos, hallados en la carretera a La Amapa, el pasado 5 de agosto.

Sin embargo, dijo, las investigaciones continúan, pues faltan implicados.

"Así es, los tres ya se entregaron", agregó.

Por este caso cuatro personas están vinculada a proceso; la Fiscalía del Estado pudo resolver el triple crimen con el testimonio de un testigo protegido.

Las víctimas desaparecieron el pasado 30 de julio.