"Jorge Abel quiere ser Alcalde otra vez, ¿cuáles fueron las principales polémicas de su trienio?"

El delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales en Sinaloa, Jorge Abel López Sánchez, confirmó los rumores este fin de semana: el 26 de enero renunciará a su cargo porque quiere ser Alcalde de Mazatlán nuevamente.

Esto, a pesar de ser uno de los presidentes municipales más cuestionados por promesas de campaña incumplidas, por encabezar una de las gestiones con más homicidios dolosos y evadir observaciones de las cuentas públicas, específicamente la correspondiente al segundo semestre de 2009 y el primero de 2010.

Incluso, apenas en el último reporte emitido en 2017 por la Auditoría Superior del Estado se revela que en su administración de 2008 a 2010 dejó una deuda por solventar de 7 millones 827 mil pesos; desde entonces apenas ha comprobado un millón 271 mil 395 pesos de los Pliegos de Observaciones.

Jorge Abel ganó la elección en 2007 respaldado por la coalición Sinaloa Avanza, formada por el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Nueva Alianza, y la campaña “del calcetín”. De quedarse en la Presidencia, aseguraba, acabaría con el problema de desabasto de agua en la ciudad y el color chocolatoso que la caracterizaba.

Pero las fallas en el servicio se volvieron una constante a partir de noviembre de 2009 con el robo de transformadores y cortes de luz que impidieron que los pozos trabajaran con normalidad.

De acuerdo con una encuesta realizada por Dinámica de Mercados para Noroeste, al término de su administración en 2010, la población de Mazatlán manifestó su insatisfacción con el Gobierno de López Sánchez, calificando su gestión con 5.2.

En cuanto a honestidad, la imagen de López Sánchez no era la mejor en ese entonces, pues la calificación que le asignó la población fue de 4.8, mientras que en términos de responsabilidad también fue reprobado con un 5.1.

Las siguientes son solo algunas de las polémicas que enfrentó Jorge Abel López Sánchez durante su administración.

LOS 'RECUERDOS' DE JORGE ABEL

El calcetín

Jorge Abel López Sánchez venció a su contrincante panista Salvador Reynosa Garzón demostrando con la ayuda de un calcetín el agua “chocolatosa”. Prometió terminar con esa turbiedad y abastecer a la ciudad. Pero en cinco meses, al menos 30 transformadores fueron hurtados y centenas de familias padecieron por la falta de servicio. Entonces vinieron los cierres de calles como una manera de protestar por el desabasto y apagones de luz que impedían que los pozos funcionaran con normalidad.

Licitación 'fantasma'

Una de las primeras polémicas se dio en los primeros meses de 2008 a raíz de la compra de una camioneta Suburban, modelo 2007, que usó desde su campaña en 365 mil pesos. El problema no fue la adquisición, sino que la concretó con recursos públicos y sin existir de por medio una licitación pública ni haber sesionado el Comité de Compras y Adquisiciones. La unidad había sido prestada por la empresa Álamo al Presidente Municipal durante su campaña proselitista, pero la conservó hasta el final.

Cuentas públicas irregulares

Uno de los temas que más dieron de qué hablar durante la administración de López Sánchez fueron las cuentas públicas. Incluso, en una primera ronda el Congreso del Estado se negó a aprobar las correspondientes al segundo semestre de 2009 y el primero de 2010, por la cantidad de observaciones. El último reporte emitido en 2017 por la Auditoría Superior del Estado se revela que en su administración de 2008 a 2010 dejó una deuda por solventar de 7 millones 827 mil pesos. En su momento, el ex Alcalde aseguró que observaciones no significaba que eran hechos consumados, “simplemente son observaciones, dudas, aclaraciones”. Finalmente las cuentas fueron avaladas por el Congreso en marzo de 2011.

De ménsulas a fierro viejo

En 2010, la Secretaría de la Unión de Locatarios del Mercado Pino Suárez denunció la desaparición de varias ménsulas de la fachada de la Bonetería La Nueva Gloria, a raíz de un incendio registrado en el lugar el 21 de enero de ese año. Meses después, el Ayuntamiento reconoció que personal del departamento de Maquinaria y Equipo se había apropiado de tres de las seis piezas que se retiraron del inmueble, catalogadas por el INAH con valor histórico, y las habían vendido como fierro viejo a un depósito de chatarra “por equivocación”.

El disparo de la violencia

Con la llegada de Jorge Abel López Sánchez a la Presidencia Municipal de Mazatlán también llegaron los homicidios, decapitaciones, secuestros y extorsiones. El “arranque simbólico” fue el 27 de septiembre de 2008, luego de que una denuncia por un asalto desatara una persecución que duró más de siete horas y terminó en la Playa Brujas, donde ocho delincuentes fueron detenidos. Mientras que el último año de Carnaval en 2010 se registró un dramático episodio, luego de que en el tradicional desfile se registraran detonaciones con arma de fuego, lo que provocó pánico, confusiones, gritos, nervios y llantos. El entonces Alcalde solía argumentar que el terminar con la violencia le correspondía al Gobierno federal y que toda esa ola de pánico, refiriéndose al Martes del Carnaval, era una estrategia malintencionada por un grupo de gente organizada por algún partido político que quería robarle la fiesta al pueblo. Solo en 2008, de los mil 164 homicidios en Sinaloa, 107 fueron en Mazatlán.

Planta de Urías

Uno de los compromisos asumidos por el priista para mejorar la calidad del agua en Mazatlán era la construcción de la Planta de Urías. Con lo que no contaba era con que su antecesora, la entonces delegada de la Semarnat en Sinaloa, María del Carmen Torres Esceberre, negó la autorización del estudio de impacto ambiental por no reunir los requisitos que el procedimiento y querer construir una planta de tratamiento sobre el mangle. Eso impidió que otra más de sus promesas se quedara a medias.