"Millennials deben emprender con pilares de negocio exitoso: consultor"

Los millennials deben emprender considerando los pilares de un negocio exitoso, que son contar con un encantador, un operador y un experto, por lo que el dueño debe analizar en cuál de las tres figuras empata, recomendó Gerardo Aranda Muñoz.

"Si se va a ser el encantador, o sea el vendedor; el experto, encargado de fabricar, producir o ejecutar el servicio; o si vas a ser el operador, encargado de que funcione todo, cobrar, tener toda la maquinaria engrasada", describió en entrevista el director general de Gallup México.

Explicó que, en el caso de las empresas, hay tantas funciones que se tienen que cubrir que sería imposible que una cabeza dominara y dirigiera todas las funciones.

El director general de Gallup México sugirió los siguientes pasos.

Primero, identificar el rol en la empresa, para después de eso conseguir quién cumpla las siguientes funciones, pues si se quiere hacer todo, las posibilidades de éxito van a disminuir, porque se va a tener menos tiempo para enfocarse en la función en la que se es efectivo, por enfocarse en las que no son.

"El dueño no puede ser el vendedor, administrador, cobrador, el de operaciones, de marketing, o ciencias de la tecnología de su propia empresa, siempre habrá alguien que haga esa función mejor, por lo que el reto es encontrar la función que mejor ejecuto", refirió.

Millennials, sin pensar en el largo plazo

El director de la empresa consultora, enfocada en estrategia, desarrollo de liderazgo y análisis avanzado de datos dijo que podría pensarse que son los millennials las principales personas interesadas en emprender, porque hay muchas publicaciones y comerciales dirigidas a esta generación.

Aranda Muñoz explicó que el tema de emprender significa realizar algo a largo plazo, sin embargo, la generación de chicos que tienen entre 18 a 30 años no consideran dentro de su principal estilo de vida o deseo, hacer las cosas a largo plazo.

Detalló que los millennials son más como un saltamontes, que van brincando y cambiando de empresas o de proyectos, de tal manera que hay mucha publicidad enfocada a los jóvenes porque hoy por hoy están abriendo menos empresas que otras generaciones.

"A los millennials les interesa vivir experiencias más que un proyecto en sí. Ya no se abren empresas por jóvenes como hace 10 años, de ahí que se ve tanto apoyo para ver si se despierta el interés para que los chicos abran negocios", señaló.

El especialista refirió que los millennials traen otro chip, otra visión de cómo quieren llevar a cabo su vida, son más autónomos, personales, no como en otras generaciones que abrían empresas con la intención de generar riqueza y empleos.

"Aun así”, agregó, “el tema del emprendimiento en el estado es muy importante, Sinaloa es una entidad que produce en gran medida productos agropecuarios y el valor agregado que se puede ver hoy, es la transformación de productos primarios”.

El especialista destacó que en la mente del emprendedor no existe la posibilidad del fracaso, por eso se avientan a incursionar en tal o cual cosa, pero el mundo de los todólogos ya se acabó.

 “Lo opuesto al fracaso no es el éxito”

Destacó que, si bien un emprendedor con miedo a fracasar no es emprendedor, lo opuesto al fracaso no es el éxito, pues es una forma muy simple de verse, ya que en realidad lo opuesto al fracaso es no fracasar.

"En la mente de los emprendedores el fracaso nunca es una opción, nunca comienzan un negocio o invierten en un proyecto pensando que van a fracasar, y fracasan muchísimas veces, pero si pensaran que fueran a fracasar no hipotecarían la casa ni dejarían de trabajar para empezar algo", señaló.

Con esto lo que se quiere decir es que, donde el emprendedor es malo no importa, si es mal administrador, no se va a dedicar a administrar un negocio, pero si es un buen vendedor, debe invertir en donde es bueno, algo que le ayude a ser mejor vendedor.

Destacó que es muy importante considerar que hacer lo suficiente para no fracasa, no quiere decir que necesariamente será ser exitoso.