"Se despiden del Carnaval los dragones y alebrijes"

MAZATLÁN._ Con nostalgia pero sin dejar caer el entusiasmo, los miles de mazatlecos y turistas que vivieron el Carnaval Internacional de Mazatlán 2017 se despidieron del segundo y último desfile que engalanó la celebración.

El paseo costero se vistió de dragones y alebrijes que desfilaron con sus colores brillantes y luminosos, destacando la realeza de Viviana I, Reina del Carnaval; Rossina I, Reina de los Juegos Florales; Ivanna I, Reina Infantil y Jorge III, Rey de la Alegría.

Eran alrededor de las 16:30 horas cuando comenzó el desfile, a lo lejos se observó como venía la fila de carros alegóricos que recorrieron de regreso a la cueva de donde salieron el domingo pasado.

Entre aplausos y sonrisas los presentes se despidieron de las 31 carrozas y bailaron al ritmo de cada comparsa que puso el ambiente en el recorrido.

El lugar se prestó para que una vez más, los asistentes y los participantes del desfile sacaran el lado fiestero que caracteriza al mazatleco ante una celebración de gran magnitud.

El gran dragón acompañó a Viviana I, Reina del Carnaval 2017, alegoría inspirada en la leyenda germánica de los dragones que custodiaban preciosos tesoros. La monumental escultura con casi 4 mil escamas hechas a mano, conquistó al público con su corpulento cuerpo en tono carmesí, intimidantes ojos amarillos y una enorme cabeza en movimiento que escupía humo.

Rosina I, Reina de los Juegos Florales 2017, acompañada por sus princesas reales Catalina y Carolina, desfiló en su carroza real inspirada en el mito del dragón reptiliano “Taniwha” de la cultura maorí de Nueva Zelanda que, curiosamente, guarda un parecido con el Dios Prehispánico Quetzalcóatl.

Los niños fueron los más sorprendidos por las figuras mitológicas que este año atraparon el Carnaval, los dragones grandes y los alebrijes fueron sus favoritos y sin duda los más fotografiados.

El desfile no perdió la esencia que lo distingue con el toque peculiar de cada tema asignado para el Carnaval.

La prueba de cariño a la fiesta del puerto la dio el Rey de la Alegría Jorge III, quien tras sufrir un accidente horas previas al desfile, se subió a su carro alegórico para despedirse de los asistentes, pese a las indicaciones médicas que sugerían lo contrario.

Las reinas homenajeadas, las del año pasado y las de este nuevo Carnaval lucieron en sus carrozas, saludaron con aquel porte que las distingue y fueron lo más admirado por esa belleza representativa del puerto.

Así los dragones y alebrijes de la máxima fiesta del puerto se despidieron de esta edición dejando el puerta la bienvenida para el Carnaval 2018.