Ya que la cartelera comercial culichi ha vuelto a apestar, como es su costumbre, hay que refugiarse en el cine disponible en streaming, en este caso en el sitio de Cinépolis Klic (www.cinepolisklic.com), que tiene disponible, desde hace unas semanas, una película mexicana que nunca se exhibió en esta ciudad.
Se trata de Un monstruo de mil cabezas (México, 2015), exhibida en competencia en Morelia 2015 y estrenada en la Ciudad de México en diciembre de 2016. El cuarto largometraje del hasta ahora infalible Rodrigo Plá (filmes anteriores, todos logrados en mayor o menor medida La zona/2007, Desierto adentro/2008 y La demora/2012) ganó el Premio Especial del Jurado en Biarritz 2015 –además de otros reconocimientos más en el circuito festivalero en 2015 y 2016- pero, ya sabe usted, esto no es garantía de que una película –y especialmente mexicana- merezca una distribución decente. Qué remedio.
Sonia (espléndida Jana Raluy), una mujer de mediana edad, pierde la cabeza cuando la compañía de seguros que ha pagado desde hace 16 años no aprueba un tratamiento experimental para su esposo que padece de cáncer.
El monstruo de las mil cabezas del título es implacable y ubicuo: se esconde tras un laconismo fatalista (“Así funciona esto”, le dice alguien a Sonia), se defiende tras incompresibles reglas inhumanas (el fármaco no es aprobado por alguna razón) y está representado por una interminable cadena burocrática.
Acompañada siempre de su sorprendido hijo adolescente (Sebastián Aguirre), Sonia decidirá, en Un día de furia (Schumacher, 1993) cualquiera, que ya tuvo suficiente, que ya no puede más. Que quiere una solución. Y la quiere ya.
Así pues, seguimos a Sonia a través de la austera cámara de Odei Zavaleta. La tensión creciente de la historia se contrasta con una puesta en imágenes acaso demasiado controlada, que nos mantiene a cierta distancia del predicamento de la pobre mujer.
Entiendo el porqué de la elección de Plá aunque, en lo personal, hubiera preferido mayor fuerza narrativa –y hasta un poco más de histeria- en los encuentros/desencuentros de Sonia con el organigrama de la compañía aseguradora.
No importa: a pesar de este tono visual minimalista, la historia escrita por Laura Santullo –adaptada de su propia novela- termina siendo devastadora. El monstruo de marras parece invencible.
Comentarios: en la página web ernestodiezmartinez.com, en la cuenta de twitter @Diezmartinez y en el correo electrónico ernesto.diezmartinez@gmail.com
Foto: Tomada de filmaffinity.com
Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.
