A un año de la explosión en Guasave, un año sin justicia para Iris
"Hoy es el primer aniversario de la explosión de El Chaleco que ocasionó la muerte de la ama de casa y dejó lesionados a sus tres hijos y su esposo"
GUASAVE._ Hace un año un fuerte estruendo sacudió la ciudad de Guasave y cambió para siempre la vida de tres familias del barrio El Chaleco.
Aquel 5 de diciembre amaneció frío, con neblina, cuando a las 7:15 horas un estallido que de principio se había dicho que se debía a acumulación de gas convirtió una casa en escombros y dejó severos daños estructurales en las dos contiguas. Más de 12 viviendas de los alrededores también presentaron afectaciones aunque en menor medida.
Las pérdidas materiales fueron de miles de pesos, pero la mayor de las tragedias vino una semana después, cuando el 12 de diciembre Iris Armenta dejó de existir cuando era atendida en un hospital de Culiacán. Desde ese día la familia ha esperado la justicia que no llega.
“Estamos inconformes porque la cosa está muy lenta, el peritaje de nosotros ya se dio, lo de ellos (autoridades) está muy incompleto, primero se fueron con la estufa de abajo, luego con la estufa de arriba y luego esperaron a que el catedrático de Chihuahua encontrara el “punto cero” y ahí pusieron otra estufa. Ya tienen tres versiones”, lamentó Joel Alonso León Limón, esposo de Iris y padre de Joel, Yoeli y Tadeo, quienes resultaron lesionados.
La investigación que tumbó la versión oficial
Después de que la versión oficial que dio la Procuraduría General del Estado, donde decía que una estufa en mal estado había desencadenado la tragedia de El Chaleco, no dejara satisfechos a los afectados, solicitaron un peritaje externo el cual dirigió el guasavense Sebastián Pinto Sepúlveda, catedrático del Instituto Tecnológico de Ciudad Juárez, el cual después de varios análisis determinó que la explosión fue provocada por una serie de factores que se combinaron, pero teniendo como punto central fallas en una antena de telecomunicaciones instalada a un costado de la casa de Iris.
“La Radiación ionizante o energía electromagnética generada en la antena, y sus diferentes inconsistencias de conexión, están muy ligados con el gas hidroxy que se generó en el ‘punto cero’ y que ocasionó la explosión en El Chaleco”, concluyó la investigación.
Sin embargo, aunque este peritaje fue presentado ante la Fiscalía General de la República, lo que han hecho es acomodar las cosas para insistir en que el acumulamiento de gas fue el causante de la tragedia, lamentó Joel Alonso.
“Es un peritaje muy completo, fueron siete u ocho especialistas los que lo hicieron y al encontrar ellos el 'punto cero' se les hizo fácil (a la FGR) acomodar ahí la estufa, se les hizo fácil, pero de una forma en la que no pueden sostenerlo, ya que llevan tres versiones y ellos mismos se están contradiciendo”, reiteró.
Buscan respaldo de la CIDH
Al considerar que las autoridades mexicanas están protegiendo a la empresa propietaria de la antena de telecomunicaciones y después de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos se declarara incompetente para atender este caso, Joel Alonso dijo que está buscando llevar su queja a la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos.
“Ya estuvimos platicando con una persona de la Universidad de Texas, un catedrático en la especialidad, se le informó del caso; tuvimos una charla también con una persona de la Universidad de San Diego y parece ser que vamos a contar con el apoyo de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, estamos ahorita en eso, sí puede intervenir”, expresó.
El padre de familia subrayó que tres personas con las que ha platicado y que forman parte de las instancias encargadas de investigar este caso le han dicho que saben que la explosión no fue causada por gas, pero si hablan y dicen que fue la antena los van a poner a bolear zapatos.
Las heridas que no sanan
A un año de distancia la calle Madero, entre el callejón Cuauhtémoc y la Colón, permanece cerrada. Sobre el pavimento frente al lugar de la explosión siguen tirados los escombros y sobre estos una lona con la fotografía de Iris con la exigencia de justicia y de explicaciones.
Varias coronas de flores ya marchitas reposan sobre lo que fue el frente de la casa donde vivían los León Armenta, junto al portón gris que daba acceso a la antena.
El lugar es vigilado las 24 horas del día por un policía municipal.
Aunque físicamente los integrantes de la familia se han venido recuperando de las lesiones sufridas en la explosión, las heridas del alma son las que no han podido sanar, ya que Iris se fue y no hay manera de recuperarla, además de que perdieron su patrimonio, reconoció Joel Alonso.
“No tenemos casa, aquí nos prestaron unos compadres de mi apá, anteriormente estuvimos en otra y andamos batallando todavía. Quisiera decirle a las autoridades que no sean crueles, somos tres familias que estamos prácticamente en la calle, que no tenemos casa, yo tengo a mis hijos que aún los llevo con los doctores y estoy absorbiendo costos desde hace un año, es un mundo lo que me he gastado y no sé ni de dónde”, dijo.
Convocan a marcha
Las familias afectadas por la explosión convocaron a la sociedad en general a una marcha hoy a las 15:00 horas para conmemorar el primer aniversario de la tragedia, la cual saldrá del parque Hernando de Villafañe y terminará en el Centro de Atención a Clientes de Telcel, ubicado por el bulevar Central.
La intención, dijo Joel Alonso León Limón, es hacer ver la molestia contra las autoridades por entorpecer la justicia y proteger a la empresa transnacional que se niega a aceptar su responsabilidad y a asumir los costos de la tragedia.