Ayuda a tu hijo a concentrarse

24 octubre 2016

"Con buenos hábitos de vida, le puedes dar una valiosa herramienta para lograr la concentración en cualquier actividad que emprendan"

Deseret News

Muchos padres continuamente se quejan de que su hijo no logra concentrarse o de que cualquier actividad que emprende lo tiene quieto unos pocos segundos. En una sociedad en la que los niños son sobre estimulados por la tecnología y un sinfín de distractores, es necesario poner un freno a tiempo y volcarlos hacia actividades que desarrollen sus capacidades más originales.

La concentración, entendida como habilidad para controlar estímulos y enfocar la atención en lo deseado, si se mantiene por un tiempo determinado constituye una herramienta que nos servirá a lo largo de la vida; para la escuela, el trabajo, los quehaceres del hogar; para manejar, estudiar y saber escuchar, entre otras muchas actividades.

Si deseamos fomentar en nuestros hijos la concentración debemos seguir una serie de pasos y habituarlos a ellos de forma sistemática. Recuerda que todo lo que se repite se convierte en hábito. Y si ayudamos a nuestros hijos con buenos hábitos de vida, les estaremos dando una valiosa herramienta para lograr la concentración en cualquier actividad que emprendan, y poder alcanzar así metas personales:

 

1. Ir a la cama temprano

 

Detrás de una buena concentración seguramente hubo un buen descanso. Inculca el hábito de ir temprano a la cama, de este modo, al día siguiente, despertará de buen ánimo para hacer sus tareas, o simplemente para aprender jugando.

 

2. Nutrir el cuerpo para nutrir la mente

 

Un niño bien nutrido tendrá más oportunidades de recibir en forma positiva cualquier aprendizaje. Alimenta a tu hijo con comidas nutritivas y ofrécele siempre agua. Una buena alimentación mejora de forma significativa los resultados académicos y los objetivos propuestos.

 

3. Orden y limpieza a la orden

 

Desde pequeños deben ordenar sus objetos personales y juguetes y colaborar en el hogar para mantener el orden y la limpieza. Esto será un buen hábito que mantendrán a lo largo de sus vidas y los ayudará a fomentar su capacidad de concentración y aprendizaje.

 

4. Menos pantalla, más lectura

 

La sobre estimulación que ofrecen las nuevas tecnologías cargan de información los cerebros de los pequeños; información que, en demasía, es difícil de procesar. Por ende, la concentración en diversas tareas disminuye. Intenta acercar a tu hijo a la lectura desde pequeño. Apaga la televisión y tómate el tiempo para compartir un buen libro; ten por seguro que nunca estarás perdiendo el tiempo.

 

5. "Los mirones son de palo"

 

Cuando estás escribiendo o haciendo una actividad muy concentrado no te gusta que te distraigan. Lo mismo sucede con los niños. Cuando veas a tu hijo concentrado en alguna tarea, no intentes ayudarlo si no lo pide, ni le preguntes qué está haciendo. Deja que él solo experimente. Así estarás fomentando la concentración y reforzando su estima para la concreción de sus propias metas.

 

6. Mira a los ojos

 

Cuando intentes explicar algo a tus hijos mantén con ellos el contacto visual. Si no te miran, pide que te miren y comienza luego a explicar. Esta acción es válida desde que son muy pequeños y también sirve para cuando debes regañarlos por alguna travesura. El contacto visual favorece positivamente la concentración.

 

7. Comienza ahora

 

No esperes a que tu hijo entre en edad escolar. Ten presente que ayudarlos y enseñarles a concentrarse les va a ayudar por el resto de sus vidas. Es un buen momento para iniciar cuando son pequeños. Le estarás enseñando una valiosa herramienta.

 

8. Sé comprensivo

 

Ten paciencia y comprende que están en una etapa de crecimiento. Sus cerebros se desarrollan rápidamente y muchas veces deben procesar mucha información junta. Ten en cuenta que la concentración es una habilidad que se adquiere con tiempo y buenos hábitos.