Da voz a la gente más olvidada
"En los últimos cuatro años, la reportera se ha encargado de comunicar las historias más duras de personas que padecen problemas de salud y que carecen de recursos"
MAZATLÁN._ Hace 14 años, el periódico Primera Hora decidió lanzar un nuevo producto para ayudar a la gente más olvidada.
Lo llamaron ¡Échale una mano!, e iba dirigido a las personas que tuvieran una necesidad y que no contaran con los recursos para cubrirla. Meses más tarde se llamaría "Los Olvidados".
En ese proyecto se involucró Verenice Peraza Camacho, quien en los últimos cuatro años se ha encargado de comunicar las historias más duras, que también han comprobado que la gente generosa sigue siendo mayoría.
"Olvidados nació junto con Primera Hora hace 14 años y nació como una parte del periódico bien dirigida a las personas que necesitaban ayuda económica o en especie; en ese tiempo, y todavía lo es, era alta la demanda de personas que necesitaban apoyo.
Diariamente tiene que salir un caso nuevo que no es difícil porque la demanda es alta de las personas que necesitan de los demás; son hasta tres casos por página".
Verenice cuenta que los casos más comunes son de personas que padecen problemas de salud y carecen de recursos necesarios.
Hay algunos que ni siquiera tienen para trasladarse hasta las instalaciones del periódico para pedir ayuda, por lo que una de las labores de la reportera es ir hasta su hogar y rescatar su historia. Algunas, más fuertes que otras o que se quedan inscritas en la mente.
"Hay veces que no andas de ánimo y llegas con alguien que está peor que tú y dices: épale, estás sana, estás bien, sí tienes esta pena, pero a ella le han dado 20, 30 quimioterapias; cosas así que te hacen decir: ¡para arriba! La gente que está enferma es muy agradecida con Dios y toda esa gente te llena".
Y así como muchos de los casos que Verenice ha atendido han terminado en muerte, existe otro tanto de historias de éxito, como el de Daniela, que a sus cinco años requería una operación a corazón abierto y que logró sobrevivir gracias al apoyo de los lectores.
"La gente no se cansa de ayudar, desde los que tienen mucho dinero hasta el más humilde que hace camino a dejar una bolsita de despensa...
Esta es la parte que salva al periódico porque el corte de Primera Hora es policiaco y normalmente la gente ve lo malo y este tipo de sección te dice que también tiene ese lado bueno".