Dejan un nombre en la historia con el paso de la Independencia

"Don Alejo García Conde, quien tuvo su paso por la municipalidad de Elota en 1811, bautizó a Ceuta porque le recordaba a su lugar de origen, un sitio de África"

LA CRUZ, Elota._ Como muestra palpable del paso de uno de los personajes de la época de la Independencia se encuentra Ceuta, lugar que recibió el nombre de parte de don Alejo García Conde, quien tuvo su paso por la municipalidad de Elota en 1811.
Pedro Piña Quiñonez, Cronista de la Ciudad, señaló que García Conde y José María González Hermosillo, éste último venía capitanando el Ejército Insurgentes en Sinaloa, fueron dos personajes que, por separado, estuvieron de paso por Elota en el año de 1811.
"De don Alejo García Conde tenemos indicio de que sí estuvo aquí porque fue quien dio el nombre a Ceuta porque él era originario de Ceuta, África, y al pasar al ver el paisaje le recordó su lugar de origen y le puso por nombre Ceuta", dijo el cronista.
La historia cuenta que González Hermosillo descansó en Elota donde durmió una noche y luego fue a San Ignacio donde ya lo esperaban las tropas de García Conde, relató.
De acuerdo a datos recopilados, manifestó, González Hermosillo realizó varios reconocimientos para entrar a la Villa de San Ignacio, pero resultaron infructuosos ya que en su búsqueda no advirtió a García Conde, quien había entrado a esta tierra reforzando al Coronel Pedro Villaescusa.
"Cuando al fin las tropas de González Hermosillo encontraron el paso del Río Piaxtla, el 8 de febrero de 1811, cayeron en una emboscada donde perdieron 300 efectivos y hubo cientos de prisioneros.
La derrota, señaló, fue estrepitosa, ya que perdieron hasta el estandarte de la Virgen de Guadalupe que había tomado González Hermosillo en algún pueblo Jalisiciendia, pero que tiempo después fue recuperado por familias de San Ignacio y actualmente está en exhibición en el museo de La Labor.

Elota en la Independencia
En 1810, año de la lucha de Independencia, Elota, junto con la municipalidad de Conitaca, pertenecía al municipio de Cosalá que también comprendía Guadalupe de los Reyes, y contaba con 8 mil 356 habitantes, según el Compendio Histórico, Geográfico y Estadístico de Eustaquio Buelna, en el año de 1873, narró el cronista.
Elota era una zona precaria, contrario a Cosalá, donde estaba el auge minero, ya que prácticamente en Conitaca y Elota las actividades primarias eran agricultura de temporal, ganadería y un poco de artesanía de barro usada para utensilios de cocina.
"La producción era mínima porque no eran tierra de riego eran de temporal, donde esperaban a la época de lluvias y los que estaban cerca de los ríos aprovechaban la humedad pero eran muy escasos, y obviamente el producto era reducido para el consumo humano", narró.
Las municipalidades de Elota y Conitaca eran las más grandes, pero en 1810 ya existían otros poblados, pero de menor población, relató.
La iluminación era a través de cachimbas de petróleo y para el consumo de agua los pobladores la acarreaban de pozos construidos en los ríos y arroyos.

El dato
Conitaca, que pertenecía a Cosalá, contaba con 13 celadurías y el número de habitantes era de 2 mil 212.
Las celadurías que tenía eran Zoquititán, hoy Pueblo Nuevo; Chirimole, Cogota, Potrerillos, El Salto, Laguna de Santa Rosa, Agua Nueva, Pitayita, Higuerita, Chiqueritos, Rincón de Ibonia, Mojonera y Portezuelos.
Elota, con seis celadurías, tenía mil 68 habitantes y regía a Higueral, Cerro Verde, Tecuyo, Salado, Ceuta y Barrio.