Esperan poder escuchar pronto sus palabras

"La bebé de apenas 2 años se comunica con sus papás por medio de señas, gritos, risas y llanto"

CULIACÁN.- Entre el llanto y una que otra sonrisa Dulce Arizbeth Angulo Montes es una pequeña con apenas 2 años y 3 meses que vive en el silencio desde el momento de su nacimiento, sin poder decir a sus papás una sola palabra ella a aprendido a expresarse de otras maneras mediante algunas señas y gritos.
Para Efraín Angulo Espinoza y Brenda Montes Aispuro, papás de la niña, desde el momento que empezaron a notar que algo no andaba bien y cuando descubrieron lo que sucedía ha sido de suma dificultad pero eso no les ha impedido buscar la manera de que su bebé logre escuchar.
"Mi niña tiene algo llamado Anacusia Congénita que comúnmente es conocido como sordera; al tener ella un año 3 meses nos dimos cuenta con juegos y que al hablarle no respondía, le poníamos música y no había reacción", recordó su papá.
Al darse cuenta del padecimiento de la bebé Efraín comenta que él y su esposa empezaron a investigar por medio de internet las posibles causas de esto y médicos en la ciudad que pudieran hacer estudios y determinar con mayor precisión lo que Dulce tenia.
"Todo ha sido muy difícil la verdad porque hemos tenido que investigar primero la parte médica y encontrar a los médicos, primeramente en Culiacán empezamos nosotros a investigar quien podía ayudarnos y nos contactamos con dos médicos muy buenos uno es Arturo Alaniz y Rosalba González".
Señaló que lo que la bebé necesita para poder tener la posibilidad de oir es un implante coclear, lo cual significa poner dentro del oído de Dulce un componente con el cual todos nacen pero que ella no pudo desarrollar.
El papá de la niña comentó que el Otorrinolaringólogo Alaniz no ha realizado una operación de tal magnitud por lo cual tuvo que viajar a la Ciudad de México en busca de otro médico preparado para llevar acabo el procedimiento, encontrándose con que no existe en el país alguien que haga dicha operación.
Expresó que los doctores que revisaron los estudios de la pequeña no le dieron posibilidades de volver a escuchar por lo complicado de la operación y como mejor solución recomendaron a los padres iniciar con lenguaje de señas y resignarse.
"Nos dijeron que la niña ya no iba poder oir nunca pero en la Ciudad de México se reunió un consejo de otorrinos para buscar una solución y nos recomendaron dos hospitales uno de Los Ángeles, California y a un doctor en Denver, Colorado y teníamos que escoger entre los dos".
Para el 23 de febrero los papás junto con su bebé viajaron a Denver con el Otorrino- Neurólogo Herman Jenkis al Children's Hospital de Colorado donde se les dio una nueva esperanza para Dulce, una operación para colocar dos implantes de coclea y un 75 por ciento de probabilidad de poder oír.
"La operación, los cuidados y terapia nos sale a nosotros en 88 mil dólares y es un dinero que no tenemos y que no se consigue fácilmente, queremos que nos ayuden con lo que se pueda porque queremos que nuestra hija pueda oir".
Efraín y su esposa tienen la esperanza de que Dulce diga sus primeras palabras y por esa razón hoy buscan el apoyo de la sociedad para poder realizar dicha operación y darle a Dulce la oportunidad de escuchar y de poder comunicarse.

CANTIDAD QUE SE NECESITA
88 mil dólares para realizar un implante coclear, medicamentos y terapias después de la operación.

AYUDE A DULCE A ESCUCHAR
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