Gancho al hígado

07 noviembre 2015

"Resurrección gigante del boxeo"

José Sulaimán

El boxeo es sin duda una mano amiga extendida hacia los pobres del mundo, esos que nacen en cunas muy humildes, que no pueden vivir una vida decente y que son rechazados por la misma sociedad por no tener los medios que les abran las puertas.
Es en el boxeo donde ellos encuentran basados en el poder de sus puños y en su inteligencia boxística, y con la ayuda de Dios y en México también de la "Virgencita de Guadalupe", como lo hiciera tan famoso el Raúl "Ratón" Macías.
La historia dice que el boxeo nació en México en Tampico, Tamaulipas, por allá de 1918, al arribo de los barcos al puerto y el derroche de los marineros en sus días en tierra, quienes al acabarse todo el dinero hacían en los burdeles un cuadro con sillas, y organizaban sus peleas de boxeo con servilletas como guantes enrolladas en las manos, el que llegó a ser tan popular que luego también lo hacían en la plaza de armas, con grandes multitudes.
Hasta que se fundó en 1921 por primera vez una comisión de box en ese ex chapopotero y jacarandoso puerto de Tampico, extendiéndose luego por los puertos del Golfo de México y llegando a la capital por ahí de 1922, cuando se fundó la primera comisión de boxeo.
Aparecieron como grandes ídolos de entonces Alfredo Gaona, quien llenó la vieja y primera plaza de toros El Toreo, "Kid Pancho", el primer clasificado mexicano mundial "Chicho" Cisneros y quien fuera un ídolo rutilante de los años 20, hasta que apareció el primer gran promotor creador de la primer época de oro mexicana, Jimmy Fitten, con el "Chango" Casanova, Joe Conde, Juan Zurita, Luis Castillo, Rodolfo Ramírez, el propio "Kid Azteca", después Nicolás Morán, Enrique Bolaños, Luis Castillo, "Memo" Valero, el "Monito" Flores y tantos y tantos otros que llenaban noche tras noche todas las arenas de boxeo.
Para llegar después el inmortal promotor Don Salvador Lutteroth a traer un toque de decencia y honestidad en el respeto a los boxeadores.
Esos eran los tiempos de que no había televisión ni nadie que pudiese luchar contra el monopolio ejercido por la mafia norteamericana liderada por aquel famoso Frankie Carbo y su Club, para negarle oportunidades titulares a los mexicanos con grandes méritos de entonces.
La siguiente época de oro del boxeo mexicano que duró casi 20 años con la aparición del famoso griego George Parnassus, promotor padrino de los boxeadores mexicanos y la del inmortal Raúl "Ratón" Macías, quien enloqueció a boleritos, abuelitas y al propio presidente, el llorado Don Adolfo López Mateos, para seguirlo también los grandes ídolos como el "Pajarito" Moreno, "Memo" Diez, etc.
Con los primeros seis campeones mundiales mexicanos Battling Shaw, de Nuevo Laredo; "Ratón" Macías, del DF; Joe Becerra, de Guadalajara; todos quienes llevaron el boxeo mexicano a la gloria mundial deportiva hasta que llegó a su fin los 47 años consecutivos que la empresa Televisa, durante los tiempos de Don Emilio Azcárraga Vidaurreta y don Emilio Azcárraga Milmo, transmitió el deporte por pantalla abierta, sin faltar un sólo año, imponiendo un récord mundial muy difícil de igualar.
Pasaron 15 años con el boxeo habiendo sido arrebatado del pueblo al pasarlo a TV pago por evento para ponerlo en manos de los que sí tuvieron dinero para pagarlo y así vinieron los tiempos de Julio César Chávez, Érick Morales, Marco Barrera, Óscar Larios, Israel Vázquez, los hermanos Márquez y tantos y tantos más que tuvieron que salir de su patria a buscar la gloria y ganar su dinero, pero sin televisión abierta, que los pudo conducir a las alturas más elevadas de popularidad en la historia.
La TV abierta volvió a México gracias al deseo que tuvo el gobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, de ofrecer por pantalla abierta a su pueblo la pelea en Japón a donde tuvo que ir el ídolo de ese estado "Rudy" López para conquistar el título Mundial CMB de peso Pluma y traerle a su estado y a México una enorme alegría.
Afortunadamente, al ver el importante "rating" obtenido en esa pelea, una empresa televisora mexicana le tuvo fe al boxeo y aquí tenemos ahora otra vez al pueblo mexicano, reuniéndose los sábados como antaño en todos los hogares de México, para disfrutar el deporte que es corazón del pueblo mexicano de costa a cosa y frontera a frontera, pero ahora ya con tres empresas televisoras diferentes participando de esta gran época, de súper oro del boxeo mexicano, y como se la iban a perder, si se tiene un promedio de 10 puntos, y muchas veces mucho más, y si multiplicamos cada punto por 65 mil hogares y 6 televidentes por hogar, nos resulta un total promedio de más de 2 millones permanentes de espectadores.
Muchas gracias y hasta el próximo domingo. No se les olvide entrar en su PC a suljosblog.com y a suljos.tv

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