'Hay mucha agua, se va el camarón'
"'Hay mucha agua, se va el camarón'"
Noroeste / Víctor Acosta
LOS POZOS, El Rosario._Cristian, un pescador con 23 años de experiencia, ha arrojado su atarraya unas 15 veces y todavía no completa el kilo de camarón.
Vienen tres, cuatro. A veces ninguno, sólo un montón de pescaditos que se atoran entre las redes.
Con mucha suerte saca un macho, luego otro, que los ofrecerá a 20 pesos cada uno, pero terminará vendiendo a dos por 30 pesos.
También saca una jaiba de buen tamaño que tiene que regresar porque es hembra y está en constante veda, y otros cuatro camarones.
Con las lluvias, la captura en el estero El Huizache, de la comunidad Los Pozos en los límites del municipio de El Rosario con el de Mazatlán, el camarón sale de buen tamaño, pero sale lento.
"Como hay mucha agua se va el camarón. Se aleja de la compuerta", dice Cristian.
"Anda esparcido. Aquí el agua no había llegado nunca hasta las escaleras".
Ayer, el embarcadero, el muelle hecho de concreto y madera, de poco más de un metro de ancho, sirve como un mercado en el que decenas de personas de otros poblados o hasta municipios, hacen el viaje para comprar un kilo de camarón en 40 pesos.
Cristian está encima de una panga que alguien estacionó ahí, consiguió un permiso y se puso a tirar su atarraya.
El embarcadero parte en dos el estero. Todas las pangas están en el norte y en el sur hay una manada de pelícanos esperando que los pescadores tiren hacia aquel lado las pequeñas presas.
La razón es que el agua corre de norte a sur, porque a esa hora del día la marea baja regresa al sur, a donde queda el mar. El agua abandona al estero y con ella se lleva al camarón, pero éste sobrevive en la línea, que está dividido por filtros.
La explicación de los pescadores es que con la caída de tanta agua en las últimas fechas, remanentes del Huracán Manuel, el camarón tuvo la oportunidad de ir más al norte y desplegarse. En La Guásima, cerca de Caimanero, el kilo puede costar hasta los 80 pesos.
"Pero ese está así", indica Cristian y mide una cuarta con su mano derecha, mientras recoge nuevamente su arte de pesca para aventarla de nuevo.
"Esos están especiales para empanizar".
Allá, dijo, cada panga puede sacar hasta 300 kilos por cada seis horas de trabajo en tiempo bueno. Cuando es malo, sólo unos 160 kilos.
Jesús Alejandro pasó por ahí, justo en donde Cristian platicaba y mandaba su atarraya.
Lleva en su mano derecha, sujetado de la cola, un toro, un pez muy parecido al atún de unos 10 kilos de peso.
"Ya pa' qué ching... me quedo", grita y presume a su paso su captura.
Jesús Alejandro también había tomado prestado la panga de "El Pillón" para tirar la atarraya. Ya había vendido un kilo de camarón a pesar de que había llegado al menos una hora antes.
Tiene unos 20 años de experiencia pescando camarón entre El Hostial y El Huizache. Cuando hay buen tiempo se puede sacar hasta 70 kilos.
Con la señora que acaba de preguntarle si hay camarón ya va una decena en menos de media hora.
"Como hay mucha agua se va el camarón. Se aleja de la compuerta. Anda esparcido. Aquí el agua no había llegado nunca hasta las escaleras".
Cristian 'N'
Pescador