'La transición no se entiende sin la izquierda': José Woldenberg
"El ex consejero presidente del Instituto Federal Electoral consideró que la izquierda mexicana pasó de ser una fuerza marginal a una fuerza presente en el mundo político"
MAZATLÁN.- La izquierda mexicana fue y es acicate del cambio democratizador que se vivió en el País, que pasó de ser una fuerza marginal a una fuerza presente en el mundo político, consideró José Woldenberg Karakowsky, ex consejero presidente del Instituto Federal Electoral.
La prueba está en que en las últimas elecciones, tres de cada 10 ciudadanos votaron por el Partido de la Revolución Democrática, dijo.
"Si algo vemos en el caso de la izquierda es que sigue siendo un referente muy importante para franjas enormes de ciudadanos; la izquierda en las últimas elecciones logró que tres de cada 10 votantes votaran por ellos, ¿qué nos habla de eso? De una implantación enorme, de que ha dejado de ser una fuerza marginal para ser una fuerza que está en el salón de máquinas del mundo político mexicano, tiene una presencia enorme", destacó durante la presentación de su libro "Política y delito y delirio", editado por Cal y Arena, en el foro de la Feria del Libro de Mazatlán.
El que la izquierda hoy figure como la tercera fuerza política más importante se debe en gran parte a Arnoldo Martínez Verdugo, candidato a la Presidencia de la República en 1982 por el Partido Socialista Unificado de México, y uno de los protagonistas principales de la historia contenida en la publicación de Woldenberg Karakowsky.
"Empieza el 1 de julio de 1985 cuando un comando del autollamado 'Partido de los Pobres' entra a las oficinas de Arnoldo Martínez Verdugo y lo secuestra; ya para 1985, una de las personalidades más emblemáticas de la izquierda mexicana. ¿Qué había hecho? Además de ser 20 años secretario del Partido Comunista Mexicano, había logrado que la izquierda para esas fechas fuera una izquierda independiente, unitaria, institucional y democrática".
Además de Martínez Verdugo, el libro del político y académico hace alusión a otros dos secuestros más: al de Félix Bautista, militante del Partido Socialista, y Rubén Figueroa, gobernador de Guerrero, secuestrado por Lucio Cabañas.
"Va dando cuenta de lo que sucede día a día con ese secuestro, ¿de qué manera? Rescatando material. El secuestro sólo es la punta de un 'iceberg' que nos conduce 10 años atrás, está escrito como un 'thriller'. ¿Por qué acudir a contar esta historia? Porque en aquellos años era el Secretario de Prensa y Propaganda del Pesum (Partido Socialista Unificado de México). Me tocó de cerca seguir el día a día y tenía algo de documentación".
La idea, añadió el ex consejero presidente del IFE, es que el libro abra la puerta a una reflexión sobre la manera en que se articula los medios y los fines en la política.
Perfil
- Nació en Monterrey el 1952
- Licenciado en sociología
- Fue presidente del IFE de 1997 a 2003
- Director de la revista Nexos
- Editorialista de medios nacionales