NUESTROS VALORES | El ballet, su destino

Elizabeth Gámez
08 noviembre 2015

"Teresita Rentería Beltrán habla del orgullo de ser alumna de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba"

Un mal sabor de boca la retó y un triunfo la hizo decidir que su vida sería de puntas, entre variaciones y posiciones. Teresita Rentería Beltrán se siente contenta de ir en el camino que quiere, sobre todo ahora que estudia en la Escuela Nacional de Ballet de Cuba.
"Es a lo que me quiero dedicar", argumenta del arte que aunque requiere de disciplina y entrega, para ella no es difícil y anhela ser una bailarina profesional, que no abundan en Sinaloa y en México.
Esa idea la reforzó cuando Teresita, que empezó en el ballet a temprana edad, ganó una medalla de oro en una competencia del INBA en Morelia, de la que dos años antes había sido eliminada por "sobrepeso", pero que contrario a inhibirla, la llevó a ocuparse en su físico y esforzarse en ser la mejor.
"Llevé una variación que bailé muchísimo que se llama La carta. Cuando gané dije 'para esto sirvo', es algo que no me costaba. El ballet no digo que es fácil, pero como que a mí no me costaba, y luego cuando empecé a tener triunfos...", narra de la motivación que vivió a los 10 años.
Nunca ha entendido por qué siempre ha bailado con grandes, de edad, y bailarines profesionales, pero le ha gustado porque han sido desafíos superados.
Vinieron más competencias, otras motivaciones. En Córdoba, Veracruz, la bailarina, en ese entonces de 11 años, fue parte de un congreso en el que fue sorprendida porque al final de éste fue elegida para competir en el Youth America Grand Prix, en Nueva York, donde destacó entre las finalistas.
Un año más tarde, en un evento en Monterrey resultó finalista, y recuerda como ilógico que sólo ganaran bailarinas regias, ello llevó a la desilusión a su maestra Karemia del Rey, y con ello a dejar de lado las competencias, pero no la preparación.

La propuesta
Con cada paso que da en el escenario, Teresita se transforma, se entrega, eso fue valorado por Ramona de Saá, directora de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba, quien en su visita a esta ciudad la vio bailar con uno de sus alumnos cubanos, de las primeras veces que la joven culiacanense giraba con un bailarín, y profesional. No estaba acostumbrada a ellos, nunca ha tenido compañeros hombres.
"Le gustó mucho la danza española, 'quiero que la bailen en Cuba'", dice que le pidió De Saá, y orgullosa, en Semana Santa regresó a Cuba, isla que visitó por primera vez a los 13 años, por un curso.
Con la también coreógrafa y Premio Nacional de Danza 2006 tomó una clase, conoció su estilo, y en una ocasión en su oficina le hizo la que ahorita es la mejor propuesta que Teresita ha recibido.
"Qué orgullo que me dijera que tomara una clase con ella, y una vez en su oficina me dijo '¿no quieres estudiar aquí?', y yo le dije 'claro'". La invitación también fue para su compañera Isabel Peña Güémez.
La bailarina, que mañana cumple 18 años, está contenta con lo aprendido con su maestra Karemia del Rey, pero no tiene duda que ampliará sus conocimientos en la escuela cubana, donde el estudio del ballet se complementa con clases de maquillaje, historia del arte, hasta, dice, cómo amarrarse las zapatillas.
"Es una oportunidad única, es uno de mis sueños irme a estudiar a Cuba, a partir de mi maestra -Karemia- porque ella estudió allá y todo lo que sabe... me ha enseñado a seleccionar el buen ballet", señala.
"Me encanta el ballet, no es que yo nací y dije voy a ser bailarina, no, mi mamá me metió, empecé a ver y aparte la motivación con que la maestra nos habla, sí nos exige pero sé que es para implantar más respeto, y sé que si no fuera así, no tuviera las bailarinas que ha formado".

Bailarina profesional
Teresita sabe que este arte conlleva esfuerzo, disciplina, responsabilidad, pero está dispuesta a ser una bailarina profesional, ya que son pocas las que hay en el estado, y las que conoce son egresadas de la Escuela Cubana de Ballet Karemia del Rey, como Claudia Bandín, que está en Monterrey; Fátima Bush Machado, que está en China, y Carolina Ríos, quien es maestra del CEA de Televisa.
"Si tengo una enseñanza así por qué desaprovecharla, es como un don y además es algo que me gusta. Me tengo que esforzar, pero es algo que me gusta".
A su regreso de Cuba, donde estará por un año, quiere ejercer como bailarina profesional en una compañía de la Ciudad de México, Monterrey o Guadalajara; esa, dice, es su pequeña aspiración. La grande es pertenecer a una internacional, y con ello seguir enorgulleciendo a sus padres y sus hermanos.

BAILARINA
- Teresita Rentería Beltrán es hija de Teresita Beltrán y José Fernando Rentería; sus hermanos son María Fernanda, María José y José Fernando.
- Recientemente egresó de la preparatoria.
- El ballet la ha llevado a conocer Veracruz, Monterrey, Morelia, Nueva York, Miami, Cuba y, dice, lo que le falta.
- Admira a Katia Carranza, bailarina de Monterrey, y a Claudia Bandín, de Culiacán.

"Si tengo una enseñanza -en Cuba- así por qué desaprovecharla, es como un don y además es algo que me gusta. Me tengo que esforzar, pero es algo que me gusta".
Teresita Rentería Beltrán
Bailarina