Sinaloa, la tercera entidad menos segura de México: Índice de Paz

04 abril 2017

"El Índice de Paz México provee un análisis detallado de los niveles de paz en el país en los últimos 14 años, incluyendo una medición de la paz en los 32 estados del país"

Noroeste.com

Sinaloa es la tercera entidad menos pacífica de la República Mexicana, con una calificación de 3.274, situándose en el lugar 30 de 32, tan sólo detrás de Guerrero y Colima, reveló el Índice de Paz de México 2017, realizado año con año por el Instituto para la Economía y la Paz (IEP, por sus siglas en inglés), y que mide el nivel de paz en todos los 32 estados de acuerdo a siete indicadores principales.

 

Sin embargo, la entidad mejoró su calificación, ya que la anterior era de 3.41, así como su lugar en el Índice, ya que el año pasado se colocó en el sitio 31, sólo por debajo de Guerrero, que por cuatro años consecutivos ha ocupado dicho puesto, y con una variación de -0.57 desde el 2011.

 

Por otra parte, el estado ahora gobernado por Quirino Ordaz Coppel registró los índices más altos en tasa de homicidios, después de Colima con 77 homicidios por cada 100 mil habitantes, Guerrero con 62 y Sinaloa con 38.

 

"Seis estados mejoraron su tasa de delitos con violencia por más de 50 por ciento desde 2011: Nayarit, Quintana Roo, Yucatán, Sinaloa, Estado de México y Nuevo León.", señaló el estudio.

 

Pero Sinaloa tiene a 3 municipios dentro de los 25 con tasas de homicidios más altas del País: San Ignacio, Badiraguato y Mocorito. Por otra parte, el impacto económico de la contención de la violencia per cápita 2016 es de 37 mil 350 pesos.

 

El Índice de Paz México provee un análisis detallado de los niveles de paz en el país en los últimos 14 años, incluyendo una medición de la paz en los 32 estados del país. Además, cuenta con un análisis del fenómeno de las desapariciones, del impacto económico de la violencia, y propuestas sobre cómo mejorar la paz.

 

La paz en México se deterioró principalmente a causa de un incremento de 18 por ciento en la tasa de homicidios, es decir, 16.7 por cada 100,000 habitantes, muy por encima del promedio global de 7.3, señaló el estudio.

 

Los cinco estados más pacíficos de acuerdo con el IPM son: Yucatán, Nayarit, Tlaxcala, Hidalgo y Coahuila. Mientras que las entidades menos pacíficas son: Guerrero, Colimna, Sinaloa, Baja California Sur y Baja California.

 

Un incremento de 18.4 por ciento en la tasa de homicidio doloso a nivel nacional durante 2016, degradó la calificación de México, y por primera vez existe un retroceso en ese índice "desde que el país comenzó a recuperarse de la guerra contra las drogas en 2012", indicó el IEP, autor del estudio.

 

Además, "La paz en México se deterioró 4.3 por ciento en 2016", señaló el análisis que considera datos de homicidio, delitos con violencia, delitos cometidos con arma de fuego, crímenes de la delincuencia organizada y presos sin condena.

 

"Después de cuatro años consecutivos de mejora, los avances se interrumpieron en 2016, con un aumento en la tasa de homicidio por segundo año consecutivo", dijo el IEP. El año pasado, sólo ocho estados redujeron sus tasas de homicidio en comparación con 2015, "lo cual sugiere que el reciente aumento en la violencia afectó a gran parte del país", agregó.

 

Además, el estudio indicó que el impacto económico de la violencia fue de 3.07 billones de pesos durante el 2016, lo que equivale a cerca del 18 por ciento del PIB en México, es decir, 25 mil 130 pesos por cada mexicano.

 

Los estados con mayor avance en los niveles de paz en los últimos 6 años son Quintana Roo, Coahuila, Nayarit, Tamaulipas y Durango. Mientras que México ocupa la posición 140 de 163 países evaluados en el Índice de Paz Global, ubicado sólo por arriba de India, Egipto y Venezuela y hasta el final del ranking regional, donde fue clasificado en el área de América Central y el Caribe.

 

 

El principal deterioro tuvo lugar en el estado de Baja California Sur, que contrario a la tendencia nacional, su tasa de homicidios se incrementó a más del triple, de 5.7 en 2011 a 19.8 en 2015, y su tasa de delitos cometidos con armas de fuego se elevó siete veces.