UAS: Cicatrices de 136 años

"Semillero de notables estudiantes, la Universidad Autónoma de Sinaloa lleva marcada la historia de los movimientos estudiantiles de los 60 y 70, la guerrilla y las muertes en esa época negra en la universidad"

José Manuel Salas

Por los pasillos del Edificio Central de la UAS aún deambulan los espíritus de los estudiantes muertos durante las movilizaciones y los conflictos estudiantiles de lo años 60 y 70, pasado gris que las nuevas generaciones de universitarios poco o nada conocen de sus antecesores que lucharon contra la intolerancia, la represión gubernamental por hacer valer sus ideales.
La Universidad se funda en Mazatlán el 5 de mayo de 1874 con el nombre de Liceo Rosales, pero al trasladarse los poderes estatales a Culiacán también cambian su nombre original a Colegio Rosales estableciéndose en las calles Ángel Flores y José María Morelos; más tarde ocupó el edificio conocido como "La Tercena", por Antonio Rosales, donde actualmente está el Archivo Histórico del Estado.
Para octubre de 1885 pasa al Mesón de San Carlos, y finalmente el 22 de abril de 1895 el gobierno adquirió para la institución un edificio que ocupaba un solar de 3.3 hectáreas en el frente sur de la Plazuela Rosales, muy cerca de la casa que habitaba el Gobernador Francisco Cañedo.
Construida su primera planta en los años 40 por Luis F. Molina, en 1945 se le agregó la segunda planta.
Concluida la Revolución mexicana, en 1918 el Colegio Rosales se convierte en la Universidad de Occidente. El entonces Gobernador General Ramón F. Iturbe decreta la autonomía universitaria.
Tres años después, en 1922, Universidad de Occidente mudó al nombre de Colegio Civil Rosales, desde donde los estudiantes se involucraron en luchas sociales y políticas de los sinaloenses, brincando la "frontera" universitaria.

'REVOLUCIONARIO' ESTUDIANTIL
La primera movilización estudiantil que la UAS tenga registro fue la encabezada por el estudiante Rafael Buelna Tenorio, quien en 1909 fue expulsado del Colegio Rosales al apoyar la candidatura a Gobernador del periodista José Ferrel y oponerse a las aspiraciones del porfirista y adinerado Diego Redo.
"El Granito de Oro" se incorporó a la lucha revolucionaria, convirtiéndose en leyenda y símbolo de la rebeldía del estudiante rosalino.
El 15 de diciembre de 1922, la historia de la Universidad registra por primera vez el nombre de una organización política estudiantil: la Liga Central de Estudiantes.

LOS AÑOS 30
En el año 1937, a influjo del Cardenismo, el Colegio Civil Rosales se transformaría en Universidad Socialista del Noroeste, planteándose reactivar la vida intelectual, cultural y política.
En este periodo se levantaron demandas estudiantiles encaminadas al mejoramiento académico, los estudiantes estaban agrupados alrededor de organizaciones como la Federación de Estudiantes Rosalinos Socialistas y el Bloque Izquierdista Rosalino, que desde 1935 proponían al Gobernador un anteproyecto de Ley Orgánica.
En 1937 estalla una huelga magisterial que planteaba demandas económicas y democráticas; en respuesta, el Poder Legislativo clausura la Universidad, interviniendo la Policía Judicial que se enfrentó a los estudiantes. El Ejército se encargó de minar la presencia del Partido Comunista Mexicano, que desde entonces ya tenía raíces en Sinaloa.
Al triunfar el movimiento magisterial y reabrirse la Universidad, en 1939 la Universidad cambia de nombre a Universidad de Socialista del Noroeste, pero en 1941, con el Gobierno del General Lázaro Cárdenas, pasa a ser Universidad de Sinaloa.
En junio de 1945 se registró una huelga en la Universidad de Sinaloa para derrocar al entonces Rector Raúl Cervantes Ahumada, acusado de provocar la muerte del ingeniero Andrés Ochoa, constructor de la segunda planta del Edificio Central, que sufrió un infarto al miocardio al ser regañado por Cervantes.
El 4 de diciembre de 1965, con el Gobierno de Leopoldo Sánchez Celis, la Universidad recobra su autonomía abrogada en 1937. Con el nuevo ordenamiento legal, desde entonces mantiene su denominación actual de Universidad Autónoma de Sinaloa.

HERIDAS DE LOS 60 Y 70
En enero de 1966, las movilizaciones estudiantiles estaban compuestas también por jóvenes de 13,14 y 15 años, principalmente de secundaria.
Una de sus primeras expresiones de lucha por libertades democráticas e igualdad social fue la demanda de descuentos del 50% en la entrada a los cines de Culiacán. Ante las negativas del Gobierno y los gerentes, las salas cinematográficas del cine Diana, Reforma, Humaya, Alcázar, Coco's y Rex fueron dañadas a pedradas por los secundarianos, cuyos líderes fueron arrestados.
La persecución y represión de líderes gestó la formación de dos grupos al interior de la universidad: una que buscaba la estabilidad estudiantil, y la otra favorable a incentivar la zozobra estudiantil.
En 1966, los estudiantes universitarios reorganizaron una huelga general para derrocar al entonces Rector Julio Ibarra Urrea que renuncia el 2 de octubre de 1966.

Desde 1968 a 1974, la UAS vivió intensamente la movilización de sus estudiantes, maestros y trabajadores, con episodios de crisis, huelgas, robos, asesinatos, plagios, guerrilla y grupos radicales que a raíz de los movimientos estudiantiles en el DF, mantuvieron secuestrada la estabilidad universitaria.
En 1970, la imposición de Gonzalo Armienta Calderón como Rector por parte de la Junta de Gobierno derivó en una larga y cruenta lucha estudiantil por derrocarlo. La salida de Armienta de la UAS tuvo un alto costo: el asesinato de los estudiantes Juan de Dios Quiñónez y María Isabel Landeros, el 7 de abril de 1972 en el mismo Edificio Central.
La Rectoría fue ocupada por Marco César García Salcido de 1972 a 1973, época en que tuvo lugar la confrontación más intensa de los grupos estudiantiles: "Los Pescados", afines al Partido Comunista; "Los Chemones", llamados así a los integrantes del grupo José María Morelos; y "Los Enfermos", grupo radical ultraizquierdista que se separó de "Los Pescados" y que se unió a la Liga Comunista 23 de Septiembre para buscar la democratización del país por medio de la lucha armada.
Arturo Campos Román, simpatizante del Partido Comunista de México, fue el Rector que bajo el disfraz del robo, el asalto o el secuestro, otorgaba financiamiento al grupo radical "Los Enfermos".
Policías, jefes policiacos, campesinos, civiles y estudiantes radicales resultaron muertos en una batalla dirigida por la guerrilla que encabezó demandas campesinas con las invasiones de tierras en Guasave y Angostura; el secuestro y quema de camiones, así como robos, asaltos, secuestros y enfrentamientos a balazos en los campos de Culiacán y Navolato.
El 17 de mayo de 1974 Carlos Humberto Guevara Reynaga, hermano del ex Rector Jorge Luis Guevara Reynaga, murió en un enfrentamiento a balazos contra "Los Enfermos" adentro del Edificio Central. Pablo Ruiz, uno de los agresores, también falleció en el tiroteo.
La Liga Comunista 23 de Septiembre, con fuerte presencia en Sinaloa y el país, reclutó estudiantes que "torcieron" su espíritu original, abandonaron las aulas de la UAS y entraron a la guerrilla, combatida por la extinta Dirección Federal de Seguridad, el Ejército mexicano y la Policía Judicial.
Para 1975, muchos jóvenes guerrilleros fueron detenidos, otros murieron o desaparecieron. Las "bajas" y la infiltración de la DFS en la Liga 23 de Septiembre minaron su actividad en Sinaloa.
Al interior, los dirigentes radicales empezaron con ajusticiamientos y desaparición de militantes sospechosos de ser espías o policías políticos. También el Ejército ha sido señalado de ser el autor de la desaparición de al menos 42 jóvenes en la llamada "Guerra Sucia". 

ÉPOCA CONTEMPORÁNEA

El Gobernador Antonio Toledo Corro fue desde 1981 a 1986 la "piedra en el zapato" de la UAS, al pretender quitarle el control de las escuelas preparatorias.
En su libro La Utopía Corrompida, Carlos Calderón Viedas, Liberato Terán y Jorge Medina Viedas señalan que el golpe de Toledo contra la máxima Casa de Estudios abrió tres frentes: un decreto para crear la actual Universidad de Occidente, se establecían las Escuelas Preparatorias del Estado (Cobaes) y se reformaba la Ley General de Educación para negar el derecho a la UAS a impartir el bachillerato.
La institución y su comunidad estudiantil ganaron el mantener la enseñanza del nivel medio superior que se extendió a 3 años.
Llegaron a ser rectores Audómar Ahumada Quintero (1985-1989) y David Moreno Lizárraga (1989-1993), dos activistas de los movimientos de los 60 y 70; el segundo de ellos bajo el perfil de estudiante radical.
En la obra La Utopía Corrompida, Rubén Rocha Moya es considerado el último de los rectores que impulsó el proyecto democrático de la izquierda universitaria, pasando después a iniciarse una paulatina regresión con Jorge Luis Guevara Reynaga (1997-2001), que debilitó a la Universidad por las recurrentes crisis financieras y políticas.
Cuestionan a Gómer Monárrez (2001-2005) de utilizar a la institución para negociar con el ex Gobernador Juan Millán una diputación local para su hijo, acto deshonesto jamás visto en la vida de la UAS.
A unos días de finalizar su administración, Héctor Melesio Cuén Ojeda (2005-2009) deja atrás la reforma a la Ley Orgánica cuestionada; su periodo es distinguido en La Utopía Corrompida por las fobias personales, el autoritarismo, la censura, el "credencialismo" y la simulación en las acreditaciones de escuelas y facultades.


José Francisco Gómez Flores.
1873 

Ismael Castelazo.
1874 

Luis G. Orozco.
1875-1892 

Francisco Sosa y Ávila.
1892-1893 

Ruperto L. Paliza.
1893-1911 

Jesús Moncayo.
1911-1915 

Bernardo José Gastélum.
1915-16, 1918-22 

Epitacio Osuna.
1916-1917 

Enrique Pérez Arce.
1922, 1924-1927

Francisco Verdugo Fálquez.
1922-1924

Manuel Páez.
1924 

José María Tellaeche.
1927-1930 

Matías Ayala Quintero.
1930-32, 1936-37

José Miguel Buelna.
1932 

Antonio Díaz Angulo.
1932-1935 

Ramón Ponce de León.
1936 

Solón Zabre Morel.
1937-1938 

Enrique Coppel Rivas.
1941 

Arturo García Formentí.
1942-1943 

Amado Blancarte.
1943-44, 1945-47 

Raúl Cervantes Ahumada.
1945

Rodolfo Monjaraz Buelna.
1947-50, 1966-70 

Humberto Bátiz Ramos.
1950-1956 

Jesús Rodolfo Acedo Cárdenas.
1956-59, 1972 

Fernando Uriarte.
1959-1962

Clemente Vizcarra Franco.
1962

Julio Ibarra Urrea.
1963-1966

Gonzalo Armienta Calderón.
1970-1972 

Marco César García Salcido.
1972-1973 

Arturo Campos Román.
1973-76, 1977 


Hugo Federico Gómez Quiñónez.
1976-1977

Eduardo Franco.
1977-1981

Jorge Fausto Medina Viedas.
1981-1985

Audómar Ahumada Quintero.
1985-1989

David Moreno Lizárraga.
1989-1993

Rubén Rocha Moya.
1993-1997

Jorge Luis Guevara Reynaga.
1997-2001 

Gómer Monárrez.
2001-2005 

Héctor Melesio Cuén Ojeda.
2005-2009