Basta de adorar imbéciles

Isaac Aranguré
22 agosto 2023

@isaacarangureconacentoenlae

La teoría de las inteligencias múltiples fue propuesta por el psicólogo Howard Gardner en la década de 1980. Esta teoría sugiere que la inteligencia no es una identidad única y general, sino que existen diferentes tipos de inteligencia, cada uno de los cuales puede manifestarse de una manera independiente en una persona.

Según Gardner, existen ocho tipos de inteligencia principales:

1. Lingüística. Habilidad para entender y utilizar el lenguaje.

2. Lógico-Matemática. Para razonar lógicamente y resolver problemas matemáticos.

3. Musical: Para apreciar, interpretar y producir música.

4. Corporal-Kinestésica: Para controlar el cuerpo y utilizarlo de manera coordinada.

5. Interpersonal: Para entender y relacionarse efectivamente con otras personas.

6. Intrapersonal: Para comprender y manejar los propios sentimientos, emociones y motivaciones.

7. Naturalista: Para observar y comprender los fenómenos naturales del mundo que nos rodea.

Es importante tener en cuenta que cada persona puede tener diferentes niveles de desarrollo en cada una de estas inteligencias y que no hay una jerarquía establecida. Esto significa que una persona puede sobresalir en una o varias inteligencias y tener menos desarrollo en otras.

La teoría de las inteligencias múltiples ha tenido un impacto importante en la educación, al reconocer que las personas tienen diferentes formas de aprender y destacar en distintas áreas y aunque esta teoría tiene su detractores, ha sido ampliamente aceptada y utilizada en el campo de la educación, donde se ha utilizado para promover enfoques más holísticos en el aprendizaje.

Dicho lo anterior, este ejercicio explica muy bien cómo podríamos interpretar las inteligencias, sin embargo a mí me parece que la más importante de todas las inteligencias es aquella que nos permite reconocer al OTRO, es decir a AQUELLA PERSONA QUE NO SOY YO. En este sentido los últimos dos ensayos de David Pastor “Vico” (lecturas recomendadas sobretodo para adolescentes y jóvenes) Filosofía para desconfiados y Ética para desconfiados abordan la imperiosa necesidad de desprendernos del individualismo y reconocer las necesidades del otro como la única forma de progresar como humanidad, en un ensayo reciente publicado para la Revista Filosofía&CO, Vico dice: <<Últimamente he pensado que quienes no pueden mirar al otro con un autentico compromiso están un poco muertos>> Y yo coincido, aunque más que muertos, yo prefiero utilizar IMBÉCIL.

Y no podemos permitir seguir adorando imbéciles y mucho menos votar por ellos. En el espectáculo mediático de nuestra sociedad las personas imbéciles sobran, es decir; aquellas personas que no tienen interés alguno y mucho menos genuino en el otro, en mejorar sus condiciones materiales, espirituales, sanitarias, etc... aún con sus plataformas, sus audiencias o sus millones son incapaces de ser atravesados por la ética para aprovechar su privilegio y canalizarlo en el bien de alguien más, viven atravesados por el individualismo, la banalidad y la superficialidad, extraviados por completos de la realidad. Ejemplos tenemos muchos, el problema es que se han vuelto roles a seguir para millones de personas alrededor del mundo, en parte gracias a los medios actuales de comunicación y masificación, se metieron en lo más profundo y básico de nuestra cultura y se ha replicado por toda nuestra estructura social y he ahí el dilema, sociedades que viven en este circulo vicioso de imbecilidad solo generan más imbéciles que eventualmente buscan ser votados en una boleta electoral.

Para Vico en sus dos ensayos el posible “antídoto” se encuentra en explorar y cuestionar algunos de los principales conceptos filosóficos a través de un enfoque critico y desafiante. Cuestionar las certezas y los prejuicios, las tradiciones éticas y morales establecidas, basadas en la reflexión, el análisis crítico y la libertad. Es decir; en la Filosofía. Yo también, nada más que para pensar en cuestiones metafísicas, es porque tenemos que resolver las físicas, y con estos círculos viciosos no se ve para cuando.

Por lo pronto, identifique a su imbécil más cercano, no lo siga más y muy importante asegúrese de no ser uno o una usted mismo.

Sólo garantizando que no dejamos a nadie atrás, es que podemos llamarle PROGRESO.

Gracias por seguir aquí, nos leemos pronto.

Es cuánto.