Coparmex y el impulso al emprendimiento:
una alternativa para reactivar Sinaloa
Cuando una crisis económica arrasa con empleos, no basta con una narrativa que promete o vislumbra que vendrán mejores condiciones para el mercado sin acciones concretas y muy, muy específicas. En los últimos 12 meses, Sinaloa ha sufrido un colapso laboral: expertos estiman que alrededor de 30 mil personas perdieron su empleo entre formales e informales. Lejos de resignarse, muchos de esos individuos pueden -y deben, a lo mejor no por gusto, sino por necesidad- dar el salto al emprendimiento, es ahí donde puede darse una reactivación económica real.
En El Emprendimiento como estrategia en tiempos de crisis, Leyva Carreras sostiene que los emprendedores reubican recursos cuando las rutas tradicionales de empleo no pueden por diversas circunstancias, transformando así la crisis en oportunidad. Y en el estudio sobre la resiliencia del emprendimiento mexicano se documenta que las unidades emprendedoras, por más pequeñas que sean, contribuyen a amortiguar el impacto de las crisis al gestar nuevas fuentes de empleo.
Es en ese espíritu que desde Coparmex Nacional pronto echaremos a andar Crece Mi Negocio, una plataforma pensada para que las MiPYMEs dejen de sobrevivir y comiencen a prosperar. Pedro Estrella, Vicepresidente de MiPYMEs de Coparmex, compartió hace unos días en un artículo que esta iniciativa no nació detrás de un escritorio, sino de conocer la realidad de miles de negocios en el país. Es el fruto del esfuerzo cotidiano: de mujeres que cuentan con libreta la contabilidad, de jóvenes con servicios listos pero sin canales de venta. Estas voces son el punto de partida; esa carga de lucha, tiene que transformarse en andamios prácticos que favorezcan las condiciones reales de los negocios mexicanos.
Las cifras detrás del desafío no son narrativas: son realidades. En México hay 5.5 millones de unidades económicas, y el 99 por ciento corresponde a MiPYMEs. Pero de esas, apenas 1.9 millones operan formalmente. La esperanza de vida promedio de un negocio es de 8.7 años. Cuando una de cada diez microempresas ha accedido a financiamiento formal, cuando solo una de cada cuatro tiene un sistema contable, y apenas 20 por ciento usa Internet en su negocio.
Crece Mi Negocio propone un camino concreto: capital accesible, capacitación útil y acceso a mercados. Pero no de forma abstracta. El capital debe reconocer la informalidad, ofrecer garantías compartidas y plazos razonables; la capacitación debe articular trayectorias por oficio y sector, con metas medibles y mentorías; el acceso a mercados exige conectar productores con compradores reales, incorporar logística, estándares y plataformas de venta.
La plataforma se nutre de una red de alianzas: empresas, academia, organismos y sociedad civil. Su valor agregado es reunir en un solo espacio las herramientas dispersas que hoy enfrentan los emprendedores. Incorpora el Distintivo Crece Mi Negocio, la Academia FIIE y otros servicios de Coparmex. Las ferias FIIE (Internacional de Innovación y Emprendimiento) y sus ediciones locales serán los espacios físicos donde lo digital cobra vida: laboratorios donde una microempresa salga con un cliente nuevo, un sistema de facturación implementado y un plan de crecimiento.
Formalizar no es un trámite: es un acto de dignidad, pues abre acceso a crédito, seguridad social y la posibilidad de integrarse a cadenas de valor. La meta no es facturar más por sí sola, sino consolidar empleo de calidad, permitir que las familias planifiquen su futuro, que las comunidades crezcan por sí mismas.
Si Crece Mi Negocio logra articular capital + capacidades + mercados, tendremos empresas que perduren, más plazas formales y territorios con capacidad productiva. Aunque la plataforma está en fase de desarrollo, hoy damos un primer vistazo: una visión que se volverá tangible en febrero de 2026 durante la tercera edición nacional de la FIIE, que reunirá emprendedores, aliados y herramientas concretas.
La presidenta de Coparmex Sinaloa, Martha Reyes, lo ha dicho: las MiPYMEs son vitales para México, y estamos comprometidos con apoyarlas. El reto es grande, pero la ruta es pragmática: medir, conectar y acompañar. Lo que hoy inicia como una plataforma debe convertirse en una máquina de oportunidades reales.