¿Cuántas drogas sintéticas existen?
El mundo de las drogas se ha transformado de forma importante en los últimos años, ya que los patrones de consumo han cambiado. Han perdido terreno las drogas naturales como la mariguana o las que conllevan procesos químicos, pero con elementos naturales como la cocaína, mientras que las drogas sintéticas como el fentanilo, las metanfetaminas o la ketamina, lo han ganado.
Y debido a que los grandes cárteles de la droga de México son altamente sensibles al mercado, han ajustado su producción a la demanda de los consumidores y ahora producen en masa drogas sintéticas en laboratorios clandestinos.
A diferencia de las drogas naturales o con procesos químicos, que ofrecen un número limitado de variaciones, las posibles alternativas en las mezclas para generar drogas sintéticas son casi infinitas y además los consumidores ávidos de nuevas sensaciones propician que las organizaciones criminales constantemente estén experimentando para encontrar nuevas drogas sintéticas o combinaciones de las ya existentes.
Por tanto, se trata de un mercado que cambia de forma acelerada y nos hace difícil estimar cuántas drogas sintéticas existen.
Una primera alternativa de respuesta a esta pregunta la encontramos en el reporte Current NPS Threats de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC), que menciona que entre 2013 y 2024 se han registrado 1,248 nuevas sustancias psicoactivas, es decir, se podría tomar este número como solución a la interrogante planteada, pero la misma está lejos de representar la realidad.
Dicho número solo incluye las sustancias que han sido identificadas por los gobiernos, sin embargo, las organizaciones criminales suelen ir más rápido que los gobiernos, sobre todo porque cuando una droga tiene características muy similares a otra ya conocida no suelen realizar análisis de componentes, porque ello implica tiempo y dinero.
Es decir, las pruebas de laboratorio requieren que químicos y farmacéuticos altamente calificados inviertan mucho tiempo y dinero para realizar los análisis de las sustancias, por lo que sólo una proporción muy pequeña de los posibles casos son estudiados. De manera que rara vez las agencias gubernamentales tienen incentivos para estudiar las muestras de drogas, salvo cuando se cree que hay una nueva sustancia que está causando estragos.
En cambio, las organizaciones criminales sí tienen todos los incentivos para innovar y crear nuevas drogas o combinaciones, por lo que podemos afirmar que los datos de la UNODC subestiman la cuantía de las drogas, el problema es que no se puede calcular el nivel de subrepresentación.
Por tanto, la segunda respuesta, menos clara, pero más certera, es que no es posible determinar la cantidad de drogas sintéticas que existen y ello se debe principalmente a tres factores:
1. Se están creando constantemente drogas sintéticas, por tanto, se trata de un número dinámico que se mueve cada semana, incluso puede ser que se mueva todos los días, de forma que cualquier cantidad que se ofrezca (exacta o no), quedaría obsoleta al poco tiempo.
2. Los laboratorios clandestinos no siempre tienen procesos estandarizados, en ocasiones trabajan de forma artesanal, de tal forma que un mismo sitio puede ofrecer diferentes combinaciones de sustancias, que puede dar como resultado drogas químicamente diferentes, aunque se parezcan.
3. El proceso para crear nuevas drogas suele ser más corto, que el que se requiere para llevar a cabo los análisis y registros de nuevas sustancias psicoactivas, por tanto, una de las carreteras es más rápida que la otra.
Un ejemplo puede ilustrar perfectamente el problema. La mayor parte de la población ha oído del fentanilo y esto puede llevar a la falsa creencia de que existe un solo tipo de fentanilo, pero hay más de 100 variaciones documentadas y otras muchas que aún no se han documentado.
Se puede encontrar fentanilo en pastillas, dulces, láminas que se disuelven, en forma líquida y combinada con muchísimas otras drogas. De hecho, hay dos razones por la cual existen muchas muertes con sobredosis de esta droga, la primera es que se trata de una sustancia muy potente. Por ejemplo, 2 miligramos pueden ser mortales, por lo que la misma se suele disolver con otras sustancias que le den volumen, aunque el elemento activo sea bastante pequeño. Por ello, una mala mezcla puede causar la muerte con facilidad.
Y la segunda razón es que para obtener un mejor efecto psicoactivo muchos laboratorios combinan fentanilo con otras sustancias, las cuales en conjunto elevan la probabilidad de sobredosis.
De tal manera que en los medios se refiere a una sola sustancia, que es el fentanilo, cuando en realidad lo más probable es que en esta categoría quepan 500 o 1,000 o 2,000 variaciones, a las cuales se les van sumando nuevas con el tiempo.
Por ello resulta imposible dar una cifra exacta de la cantidad de drogas sintéticas que hay en la actualidad. De hecho, casi con seguridad se puede afirmar que no existe persona o institución que pueda ofrecer una cifra exacta y cualquier estimación puede estar sujeta a debate.
* Víctor Manuel Sánchez Valdés (@victorsanval) es profesor investigador de la Universidad Autónoma de Coahuila, especialista en seguridad pública y doctor en políticas públicas por el CIDE. Correo de contacto: victorsanval@gmail.com.