La inversión social de la paz

La paz no se construye militarizando las calles ni por medio de la instalación de cámaras de viodeovigilancia, afirmó Antonio Roveda Hoyos al disertar la conferencia “La paz como inversión social: apuestas y compromisos reales”.

El comunicador y periodista colombiano sostuvo que la guerra es una forma arcaica de vivir y que en la sociedad actual existe gran nivel de permisividad ética y estética, que ha incidido en el cambio drástico de los imaginarios colectivos.

Recordó la frase de que “siempre es mejor una paz imperfecta que una guerra perfecta” e instó a luchar contra la indiferencia a ejemplo de Bertolt Brecht, porque la paz es una responsabilidad, un deber y un derecho de todos que se debe construir con objetivos de desarrollo sostenible.

Roveda Hoyos subrayó que el negocio de la paz no se logra con acciones filantrópicas, asistenciales y paternalistas, sino mediante la implementación de una Red Académica de Valor Compartido, en la que unan esfuerzos universidades y empresas estimulando e impulsando proyectos de investigación.

Enfatizó que el reto es cómo construir una cultura de la paz en la familia, empresa, academia y demás ámbitos de convivencia, así como elaborar estrategias para desarmar el lenguaje, pues se encuentra totalmente manipulado e ideologizado y se ha convertido en un instrumento de dominación, al igual que se le utilizó en tiempos del nazismo.

El académico colombiano reiteró que todos los esfuerzos se deben canalizar en cómo construir estrategias empresariales para la paz, lo que puede lograrse mediante el desarrollo de varias dimensiones: gestión con responsabilidad social no cosmética, desarrollo social inclusivo, sostenibilidad ambiental, participación institucional, capital humano y convivencia.

Insistió en la importancia de impulsar el crecimiento de la economía naranja, que estimula la creatividad, emprendimiento y felicidad.

¿Invierto en la paz?