Liderazgo centrado

Carlos A. Dumois
16 mayo 2018

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Hace falta ubicarnos ante un concepto balanceado del liderazgo. Tenemos que definir por dónde podemos empezar a transformar nuestras empresas.
La mayoría de los empresarios hoy se dan cuenta de que sus organizaciones necesitan rediseñar sus modelos de negocio. Muchos de ellos no saben cómo hacerlo. La verdad es que requieren también de un nuevo modelo de liderazgo.
Joanna Barsh, Josephine Mogelof y Caroline Webb, de la firma consultora McKinsey, han sintetizado un concepto de liderazgo al que llaman Liderazgo Centrado, y lo definen en 5 grandes dimensiones: encontrar sentido en el trabajo, convertir temores en oportunidades, impulsar conexiones y sentido de comunidad, afrontar los riesgos y reforzar la energía ante los colaboradores.
Quiero compartirles lo que estas profesionales han encontrado al entrevistar líderes de todo tipo de organizaciones y trabajar con ellos. Profundicemos en esas cinco dimensiones.
1. Encontrar y crear significado en el trabajo. Encontrar nuestras fortalezas y ponerlas al servicio de un propósito que nos inspire; nos comunican entusiasmo porque el propósito es importante en lo personal, y actuamos disfrutándolo. De todas las dimensiones del liderazgo centrado, el significado tiene un mayor impacto en la satisfacción del trabajo y de la vida. La contribución del significado a la satisfacción de la vida es cinco veces más fuerte que en las otras dimensiones.
Compartir significado para inspirar a los colegas requiere que los líderes se conviertan en grandes contadores de historias que toquen las mentes y los corazones. Estas destrezas son de importancia para los ejecutivos que atraviesan por transiciones mayores, ya que se requiere una motivación personal fuerte para superar el temor que acompaña al cambio.
2. Perspectiva positiva. Adoptar un modo constructivo de ver el mundo y convertir en oportunidades incluso situaciones difíciles, con miedo y estrés. El cambio y la incertidumbre crean estrés en los líderes que no suelen ver oportunidades en esas condiciones. La innovación y la creatividad son de gran ayuda.
3. Crear conexiones. Se trata de reforzar el sentido de pertenecer a una comunidad, creando las conexiones que tienen tal efecto. Las cascadas de conexiones verticales del CEO hacia abajo se rompen cada vez más fácilmente debido a la velocidad y complejidad de las modernas comunicaciones.
Los líderes dependen cada vez más de su habilidad para manejar complejas redes de conexiones, que les resultan sobrecogedoras, ya que no se adaptan al estilo de las tradicionales comunicaciones lineales. De otra parte, todo esto permite que muchas personas puedan contribuir con diversas ideas a la formación de una sabiduría o cultura, y a un mayor compromiso común. Los líderes tienen que adaptarse hoy a esta nueva realidad, aprovecharla y seleccionar líderes afines.
4. Enfrentar riesgos. Buscar y comprometerse con oportunidades, al margen de sus riesgos. En tiempos de cambio los riesgos son usuales. Para muchos líderes promover en sus colaboradores el manejo de riesgos es algo extremadamente difícil; pero lograrlo, transmitiendo ese coraje, puede detonar un tremendo potencial.
5. Reforzar la energía. Sostener la energía es la fuerza vital del cambio. Se rata de practicar formas de sostener la energía durante un largo período de liderazgo. Sostener el cambio requiere el entusiasmo y compromiso estable de muchas personas en una organización. Con frecuencia el entusiasmo y esfuerzos iniciales de un cambio pronto deterioran la energía requerida.
Para los líderes es difícil sostener la energía y el compromiso a menos que sistemáticamente restauren su propia energía (física, mental, emocional y espiritual), incluso como modelo para que los demás hagan lo mismo. Muchos líderes con frecuencia lo descuidan.
El liderazgo centrado es una travesía, no un destino, y se inicia con una decisión personal. Hablamos con frecuencia de transformar a nuestra organización, cambiar la mentalidad y las actitudes. Pero la transformación no es sobre eso, está centrada en mi persona. Empieza conmigo y mi determinación de cambiarme a mí mismo. Entonces podremos transformar a los demás.
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Carlos A. Dumois es Presidente y Socio Fundador de CEDEM.

 

* “Dueñez®” es una marca registrada por Carlos A. Dumois.