No nos falles Óscar Fidel

Jesús Rojas Rivera
24 mayo 2019

""

jesusrojasriver@gmail.com


Óscar Fidel González Mendívil es un hombre conocedor del derecho, que ha impartido cátedra y se ha desempeñado en el servicio público con eficiencia, no le conocemos una sola mancha de corrupción en su expediente, por el contrario, para muchos profesionistas Óscar Fidel, es un hombre de leyes, humanista y de conducta pública intachable.
Fue Fiscal General en Guanajuato y quiso serlo de Sinaloa, no pudo, llegó a la terna final pero los votos de la pasada legislatura favorecieron al Dr. Juan José Ríos Estavillo, el otrora ombudsman sinaloense, también un abogado respetable.
Pero ahora ganó, se impuso en la preferencia de los legisladores para presidir la Comisión de Víctimas que nace en la Ley de Protección de Víctimas del Estado de Sinaloa, vigente desde 2014, pero también letra muerta desde entonces.
González Mendívil tiene una idea muy clara del funcionamiento de las instituciones en particular de aquellas encargadas de la procuración de justicia. No solo despachó en ellas, sino que las ha construido, modernizado y mejorado. Es pionero en la propuesta de la creación de “agencias especializadas” y un modelo de medición de “productividad en las agencias de los ministerios públicos”. 
Por un lado entiende los problemas del día a día en las agencias del ministerio público, las cargas de trabajo de las policías investigadoras, la limitación de los recursos en las fiscalías y el cúmulo de expedientes almacenados en bodegas empolvadas que no tienen  para cuando resolverse.
Pero también, entiende el dolor de la madre que perdió a su hijo en un secuestro, la frustración del pequeño comerciante al que dejaron sin patrimonio en un asalto, la impotencia de miles de sinaloenses que año con año son víctimas del robo de sus bienes patrimoniales y de aquellos desplazados que simplemente no tienen nada más que perder porque la delincuencia se los quitó todo. 
Óscar Fidel no es ajeno al movimiento de mujeres denominado “las rastreadoras”, madres, esposas y hermanas de los miles de desaparecidos. Valientes que con sus manos temblorosas escarban la tierra para encontrar una pista, una señal, un rastro para dar con sus familiares desaparecidos. 
Por años el sistema de justicia penal en México se concentró en el acusado o el delincuente, las pruebas, la reparación material de los daños, el papeleo interminable, las denuncias y sus ratificaciones. Cientos de reformas a los códigos penales locales y al federal para tratar de reducir la violencia. Endurecieron penas, crearon nuevos delitos, tipificaron conductas, derogaron otros tantos, pero nunca nadie pensó en las víctimas. 
Por eso es que confiamos en Óscar Fidel, porque él sabe muy bien que las víctimas y sus familias tienen derecho a la protección y atención de las instituciones como la parte más vulnerable del sistema de justicia penal. 
Nadie le va a venir a enseñar que él está, desde el primer minuto que tomó protesta, obligado a exigir la reparación integral de los daños materiales e inmateriales de los que son o hemos sido víctimas de la comisión en nuestra contra o nuestros seres queridos.
Sé porque lo conozco, que el nuevo titular no buscó el cargo para ver “cómo va saliendo el día a día” y mucho menos para ganarse unos centavos. Estoy seguro que tiene un plan, una estrategia y una metodología para hacer que la Ley de Víctimas se cumpla sin importar el riesgo que se tenga en ello. No nos falles Óscar Fidel, en tus hombros recae ahora la difícil tarea de recobrar la confianza institucional que los ciudadanos perdieron en años de impunidad, corrupción, abuso, e incompetencia. Luego le seguimos...