Politizan bloqueos de calles y carreteras
El diálogo al que no fue Baltazar Valdez
A Baltazar Valdez Armentia, dirigente de la agrupación Campesinos Unidos de Sinaloa que el martes paralizó el centro de Culiacán y obstruyó casetas de cobro de peaje en carreteras, se le invitó a la mesa de acuerdos que un día antes presidió el Secretario de Agricultura federal, Julio Berdegué Sacristán, con organizaciones del sector, pero el líder de la movilización declinó al diálogo al argumentar el apremio de cumplir con la protesta del Frente Nacional de Rescate del Campo.
A contracorriente también de las mesas de trabajo instaladas en Sinaloa para atender la crisis de la agricultura comercial y social, ordenadas éstas por la Presidenta Claudia Sheinbaum, la maquinaria del conflicto funcionó a la perfección en perjuicio de ciudadanos que fueron los únicos afectados por la obstrucción de vías de comunicación esenciales para la movilidad social.
En este punto de inflexión es donde entra a revisión lo legítimo que sin duda es el derecho a manifestarse y expresarse, más cuando la labranza de la tierra sí sufre de abandonos y rezagos, pero igual permea la posibilidad de la politización cuando los cabecillas de la inconformidad se rehúsan a ser parte de la mesa tendida para los acuerdos. Les ofrecen negociación y responden con hostilidad cuyas consecuencias recaen al final de cuentas sobre un conglomerado humano que lo menos que necesita es más beligerancias.
En el oficio recibido por la CUS el 10 de octubre se le expone a Baltazar Valdez que por instrucciones de Berdegué se le invita a un diálogo que se celebró el día 13 del mismo mes a las 15:00 horas en el piso 12 de las oficinas de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, ubicadas en Avenida Cuauhtémoc y Municipio Libre, en la capital del País. “Por tratarse de asuntos tan importantes para la agricultura en México, esperamos contar con su valiosa presencia”, agrega.
En la respuesta con fecha 11 de octubre Valdez Armentia argumenta el rechazo a asistir a la reunión debido a que “desafortunadamente se realizará un día antes de la manifestación convocada por el Frente Nacional de Rescate del Campo Mexicano”. Justifica en que “vista la creciente respuesta a la convocatoria del FNRC, atendida por productores de más de veinte estados de la República, que harán manifestaciones de diferente tipo e intensidad de manera simultánea este martes 14 de octubre, es apremiante que nos mantengamos activos y atentos a la organización del movimiento nacional convocado”.
Incluso Valdez Armentia incurre en contradicción al declararse “conscientes de la importancia de mantener una mesa de diálogo en la que deban participar las secretarías responsables y relacionadas con la problemática del campo, esto es Agricultura, Economía, Hacienda y Gobernación”, pero a la vez se excusa por no atender la invitación de Berdegué.
A la reunión que el Secretario de Agricultura presidió el lunes con cultivadores de maíz y otros granos básicos de Sinaloa, Guanajuato, Jalisco, Michoacán y Puebla acudieron ocho dirigentes y productores sinaloenses, en seguimiento del encuentro que el Gobernador Rubén Rocha Moya sostuvo el 22 de septiembre con los liderazgos de las organizaciones agrícolas del estado, y en continuidad de la sesión en la cual hace una semana el Consejo Estatal de Desarrollo Rural Sustentable aprobó la siembra de 659 mil 132 hectáreas en el ciclo agrícola otoño-invierno.
Entonces inicia la dificultad de todos los años donde la tarea de separar la injerencia política de la lucha genuina de los agricultores y campesinos exige un gran esfuerzo de disección de ese nocivo siamés sin mayor bisturí que el del instinto ciudadano que pone a salvo lo que beneficia a la sociedad, así se esconda entre vísceras de oportunismo y lucros obtenidos mediante la apropiación de grandes causas comunes.
Y si alguna utilidad derivara de este episodio de Gobierno por primera vez activado en entender y atender las dificultades que agobian al campo de Sinaloa, y organizaciones que exigen diálogo y lo rechazan cuando éste se les ofrece, sería la de empezar a afinar el olfato cívico frente a la época preelectoral donde abundarán falsos pastores, líderes y mecenazgos.
Despreciar una mesa servida,
Donde el diálogo es el manjar,
Deja mal parado a Baltazar,
Y la lucha por él dirigida.
Las buenas prácticas en seguridad pública y construcción de paz en estados como Chihuahua, Quintana Roo, Nayarit, Jalisco, Guanajuato, Nuevo León, Coahuila, Zacatecas, Baja California, Aguascalientes y Veracruz ayudarán a que Sinaloa estructure las políticas públicas y la intervención cívica que permitan recuperar la tranquilidad y legalidad perdidas en el largo período de violencia en que continúa inmerso el estado de los once ríos. Esto sucederá en el Encuentro Ciudadano de Seguridad y Justicia en México que el Consejo Estatal de Seguridad Pública y Ciudadanos Evaluando realizarán en el Hotel Lucerna de Culiacán hoy y mañana, 16 y 17 de octubre, con las ponencias también de Beatriz Mejía Restrepo, fundadora y Directora del Grupo Internacional de Paz, de Colombia, y de Nayeli Sánchez Estrada, titular de programas en México de la Oficina para las Drogas y el Crimen de Naciones Unidas.