Presidente de México Lic. José López Portillo 1976 – 1982

20 junio 2018

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Mario Arturo Huerta Sánchez

 

La primera vez que tuve la oportunidad de tratar al Lic. José López Portillo fue cuando él era Director de las Juntas Federales de Mejoras Materiales en 1960, y yo tenía algunas obras Sub-contratadas con el Arq. Luis Velasco como pavimentación de calles en terrenos ganados al mar y un Gimnasio en la Colonia Benito Juárez. En 1962 vino a Mazatlán acompañando al Presidente Lic. Adolfo López Mateos a la inauguración del Gimnasio una semana antes, vino a Mazatlán el Lic. Pedro Ojeda Paullada que era Sub-Director de las Juntas Federales de Mejoras Materiales, quien estuvo toda la semana en Mazatlán para asegurarse que se terminara la obra oportunamente para su inauguración. En ese breve lapso de tiempo Pedro y yo nos hicimos muy buenos amigos y estuvimos pendientes que todo se hiciera bien y a tiempo.

En octubre de 1968 con motivo de unas declaraciones que hizo el entonces presidente de la Cámara de la Construcción culpando al Gobierno de la matanza de estudiantes y que por tal motivo fue destituido ante la queja que recibieron los principales miembros de la Cámara, fui comisionado como recién nombrado de Sub-Director a cargo de Relaciones, para presentar disculpas al Sr. Lic. José López Portillo, entonces Director del Consejo Legal de la Secretaría de la Presidencia, quien me dijo que el Lic. Díaz Ordaz ya estaba enterado que esas declaraciones no eran el sentir de los asociados a la Cámara y que estaban convencidos de que tales declaraciones fueron de una sola persona (ver capítulo Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción). Después de una breve plática le dije que era mi sincero deseo que fuera Presidente de la República, a lo que me dijo que para ello había que trabajar mucho y hacer las cosas bien.

 

En mayo de 1973, que yo era Presidente Municipal de Mazatlán, recibí una llamada del Sr. Gobernador del Estado, Lic. Alfredo Valdés Montoya para informarme que iba a venir a Mazatlán el Sr. Lic. José López Portillo, Director General de la Comisión Federal de Electricidad y que él no podría venir a recibirlo y atenderlo, por lo que me pidió que lo representara atendiéndolo durante su visita a Mazatlán. Así fue como me presenté en el aeropuerto en un autobús que nos condujo al muelle en que estaba un barco de carga del que se iba a descargar un equipo para la Planta Hidroeléctrica de Mazatlán; Durante el trayecto le informé que en la TV habían dicho que secuestraron al Cónsul de Alemania en Guadalajara, de lo cual, preocupado expresó “Pobre mi Presidente” refiriéndose al Lic. Luis Echeverría, instruyendo a su secretario a que se mantuviera informado. Llegando al muelle me invitó a acompañarlo a subir a ver el equipo que llegó. En la cubierta del barco había tuberías que obstaculizaban el paso hacia el lugar en donde estaba el equipo, el licenciado que andaba vestido sport caminaba ágil y ligero, en cambio yo con saco y corbata me movía con dificultad. Después de ver el equipo nos bajamos y nos dirigimos a un guardacostas en donde su comandante Capitán Mexueiro, amigo del Lic. José López Portillo nos invitó a comer unos exquisitos ostiones, callos de hacha y otros mariscos. Después de la comida hicimos un recorrido por las obras de las Avenidas Sábalo-Cerritos, Insurgentes, alumbrado de las playas de la Avenida del Mar y aproveché para mostrarle las obras que estaba realizando en Mazatlán y para platicarle de la ocasión que estuve con el Gral. Lázaro Cárdenas en el estudio de su casa, después de la comida a la que fui invitado con motivo de su cumpleaños 72, el sábado 21 de mayo de 1967. Como parte de la conversación que tuve con el General durante una hora, me preguntó si yo aspiraba a ser Presidente Municipal y al contestarle que no había pensado en ello, él me dijo que yo, como Ingeniero sabía bien lo que la ciudad necesitaba y que como él pensaba que yo llegaría a ser Presidente Municipal me recomendaba como algo prioritario que llevara todos los servicios a las colonias populares. Como hasta esta fecha ya tenía en proceso las obras de agua, drenaje y luz, únicamente me faltaba el alumbrado público, por lo que aproveché la ocasión para solicitarle al Lic. López Portillo esa obra, que de inmediato me aprobó al dirigirse el Ing. Francisco Jáuregui, Superintendente local, instruyéndolo para que se hiciera cargo de su realización. También le informé al licenciado que estaba en proceso la iluminación de las islas Lobos y Venados, pero me faltaba parte del cable submarino, por lo que luego se dirigió al Ing. Ortíz Montuy preguntándole si había en bodega ese cable, al informarle que sí, lo autorizó para que nos hiciera llegar el faltante necesario, lo cual le agradecí encarecidamente. Luego pidió a su gente que informara a los veracruzanos lo de la iluminación de las islas y les sugiriera que iluminaran San Juan de Ulúa. 

 

Fue hasta el 13 de mayo de 1976 que volví a ver al Lic. José López Portillo cuando vino a Mazatlán en campaña para Presidente, en una reunión que se celebró en el transbordador Azteca a la que fui junto a mi compañero de golf, “Güero” López Negrete, que era amigo del Lic. José López Portillo cuando eran jóvenes en la Colonia del Valle de la Ciudad de México, en un grupo que también estaba “El Negro” Durazo. Cuando iba saliendo el licenciado, vio al “Güero” López Negrete y le dijo “que tal ‘Güero’, como has estado”, contestándole éste, que vino a saludarlo y felicitarlo, y cuando intentó presentarme, le dijo que ya me conocía desde hacía tiempo preguntándome “cómo está Ingeniero Huerta”, gusto en verlo nuevamente.

Me avisaron de la Federación de Colegios de Ingenieros Civiles que el Presidente López Portillo recibiría en Los Pinos, a todos los Presidentes de los Colegios de Ingenieros Civiles del País el día 8 de octubre de 1980 a las 6:45 p.m. a donde me presenté puntualmente. El Presidente nos exhortó a que invitáramos a todos nuestros compañeros a que uniéramos nuestras ideas y técnica para fortalecer las acciones que está realizando para el desarrollo del país. Su gremio es muy importante y deben darle el lugar que merece, dijo para terminar y luego quiso saludar a cada uno de nosotros. En mi turno le dije que ya me conocía de cuando lo recibí en Mazatlán cuando yo era Presidente Municipal y el Director de la CFE. Me contestó que me conocía desde antes de esa ocasión y que le daba gusto que yo siguiera participando ahora como Presidente del Colegio. Volví a ver al Lic. López Portillo en la ciudad de Aguascalientes, a donde fue a declarar la apertura de la VI Asamblea Nacional de Corresponsalías del Seminario de Cultura Mexicana, los días 3 y 4 de diciembre de 1981. Después de la apertura en el Teatro Morelos, nos fuimos al Patio Domecq en donde hubo una comida que ofreció el Gobernador del Estado al Presidente José López Portillo. Me acerqué a saludar al Lic. López Portillo a su mesa en la que le dije que yo era Presidente de la  Corresponsalía del Seminario en Mazatlán y me contestó que le daba gusto que yo también participara en las causas culturales, interviniendo el Lic. Salvador Azuela, Presidente del Seminario, expresándole que yo estaba haciendo muy buena labor de promoción cultural y que era una de las mejores corresponsalías, por lo cual me felicitó el Lic. López Portillo. En la mesa también estaba mi buen amigo Lic. Pedro Ojeda Paullada quien iba acompañando al Lic. López Portillo a Aguascalientes, que también me felicitó. Ahí también se encontraba el Profr. Alejandro Topete, presidente de la Corresponsalía de Aguascalientes. Saludé a todos los miembros titulares que habían estado en Mazatlán. 

 

Nuevamente fuimos convocados los Presidentes de las Corresponsalías del Seminario de Cultura Mexicana a asistir a la Reunión para celebrar el 60 Aniversario del Seminario, que se efectuaría en Los Pinos el día 2 de marzo de 1982.

 

El Lic. Salvador Azuela, como Presidente del Seminario, expresó el agradecimiento de todos los miembros del Seminario por el apoyo que siempre ha dado a las actividades que se han realizado en todo el país. Por su parte el Lic. José López Portillo nos felicitó por los logros y la labor en pro de la cultura que se estaban realizando en el país. Después saludó a cada uno de los que asistimos. En mi turno, el Lic. José López Portillo me dijo que le daba gusto que yo siguiera como Presidente de la Corresponsalía del Seminario en Mazatlán promoviendo la cultura que tanto le hace falta a los mexicanos. En ese acto estaba como invitada mi prima Griselda Álvarez, que al saludarla, comentamos la visita que le hice en Colima siendo yo Gobernador de Distrito Rotario y ella Primera Gobernadora del Estado. Al día siguiente, publicó el diario de Colima que ella y yo éramos biznietos del Primer Gobernador de ese Estado, el General Manuel Álvarez, al cual erigieron una estatua en Villa de Álvarez. Mi papá se llamaba Juan Francisco Huerta Álvarez, quien nació en Colima y emigró a Mazatlán en 1915 por causa de la Revolución.

 

Once días después, el 13 de marzo de 1982, volví a saludar al Presidente López Portillo, cuando vino a Mazatlán para inaugurar una Reunión de Diputados Federales que se celebró ese día en el Hotel El Cid. Al salir de la Reunión venía acompañado por el Gobernador del Estado de Sinaloa, Antonio Toledo Corro a los que me acerqué a saludar, mostrándoles una fotografía que me tomaron junto al Lic. José López Portillo en mayo de 1973 cuando el era Director General de la Comisión Federal de Electricidad que al verla expresó “cómo ha pasado el tiempo”. Luego le pedí que si por favor me dedicaba la foto, lo que me contestó que con mucho gusto, pero que lo haría en el autobús que lo iba a llevar al aeropuerto y se lo entregaría al Gobernador Toño Toledo para que él me la diera. Le di las gracias y nos despedimos con un afectuoso abrazo. Por la tarde Toño Toledo me entregó la foto con la dedicatoria que dice “Oh cambios, oh tiempos, con amistad añeja al Ing. Mario Huerta Sánchez” y su firma.

Le di a Toño cumplidas gracias por haberme entregado la foto.

Fue la última vez que me encontré con el Lic. José López Portillo.

El nombre completo del Licenciado era José Guillermo Abel López Portillo y Pacheco.

Nació el 16 de junio de 1920 y murió el 17 de febrero de 2004.