Primer informe: ¿Qué le falta al Gobierno de Quirino Ordaz?

Adrián López Ortiz
19 noviembre 2017

""

adrianlopezortiz.com
 
Los sinaloenses tenemos un Gobernador técnico. Quirino Ordaz es un funcionario público especialista en finanzas venido a político. 
 
Algo similar pasa con su gabinete. El Gobierno actual está integrado por profesionales expertos en sus áreas. Agricultores, empresarios, abogados. Eso no es malo, todo lo contrario: el expertise es una gran ventaja. Pero al Gobierno actual le hace falta el hombre-orquesta. El creativo, es decir, el político. 
 
El mismo Secretario de Gobierno, Gonzalo Gómez Flores es también un técnico. Un profesional de las leyes. Es muy obvio que a pesar de la inversión multimillonaria en infraestructura (concentrada sobre todo en Mazatlán), y a la buena administración para capotear la herencia malovista, a este Gobierno le falta discurso, explicación, socialización. 
 
Por eso, aún con la evidencia de mejores prácticas de gestión pública durante estos primeros nueve meses de Gobierno, la imagen del “Gober” no levanta y las críticas sobre su liderazgo son bastante ácidas. 
 
Y es que dónde más se ha estrellado este Gobierno es a la hora de convencer a los sinaloenses de que son distintos de los anteriores. Sin duda hay mucha distancia si comparamos hombre por hombre. ¿Quién podría comparar la sobriedad de Gómez Flores con la tenebra de Gerardo Vargas?, ¿o la ineficacia de Juan Guerra con los buenos oficios de Juan Habermann
 
Sin embargo, los datos son muy claros respecto de los dos grandes pendientes de este Gobierno: seguridad y corrupción.  
 
En seguridad los números son durísimos, todavía no acaba el año y ya llevamos más muertos que en 2016. Si bien el número de homicidios ya bajó del umbral de los 100 por mes. Es muy claro que cuando los delincuentes quieren hacer sentir su poder, gozan de total impunidad para hacerlo. 
 
Ahí está el caso de los feminicidios recientes en Mazatlán y el miedo que invade la vida nocturna de los culichis tras el asesinato de dos empleados en un bar, en lo que apesta a mensaje de intimidación tras el asesinato de una joven en el estacionamiento del mismo lugar. Asesinatos que indignan porque apuntan a la filtración del video y a la nula capacidad de la Fiscalía para garantizar la seguridad de los involucrados. 
 
Y en el colmo de la ineptitud, las autoridades clausuraron la fuente de empleo: ¡es como clausurar un banco porque lo asaltan!
 
En corrupción, el Gobierno actual insiste en que las denuncias y las investigaciones siguen su cauce. La inhabilitación de Armando Villarreal y José Luis Sevillafueron recibidas como una burla a los ciudadanos y como un mensaje político a los malovistas, pero no como una verdadero precedente de justicia contra los corruptos.  
 
Vale también recordar el atropello autoritario en el tema de la aprobación al Impuesto Sobre Nómina y en la sordera del Gobierno actual en el tema de la tenencia que está afectando duramente las ventas de lo distribuidores y el bolsillo de los sinaloenses que prefieren comprar y emplacar en Durango, Nayarit o Jalisco. 
 
En suma, y a pesar del poco tiempo de este Gobierno, se reconocen las capacidades técnicas y la intención de una mejor administración. Se aprecia el esfuerzo por poner a Mazatlán en condiciones de infraestructura turística de altura y, sobre todo, se nota que hay un mayor respeto y cuidado por la gestión pública.  
 
Pero no puede olvidar el Gobernador, ni los empresarios que lo impulsaron, que hacer Gobierno no es hacer empresa. Se parecen mucho, pero no son la misma cosa. Gobernar es explicar. Gobernar es dialogar. Gobernar es hacer equipo.  
 
Es curioso, pero cuando a los ciudadanos se les pregunta por su opinión de los gobernantes anteriores, no recuerdan cuántas calles pavimentaron. Recuerdan su honestidad y su transparencia; su capacidad de diálogo y construcción de relaciones con diversos sectores, sobre todo con los críticos y opositores. Se acuerdan de su liderazgo y su discurso. 
 
Eso que este Gobierno ha apostado por ningunear en ese afán ejecutivo, que es lo mínimo que debemos esperar como ciudadanos: que hagan su trabajo, que lo hagan bien y que a partir de eso, sean capaces de construir proyectos compartidos.
 
Este Gobierno apenas empieza. El malovismo aún tiene cuentas pendientes con los sinaloenses pero tras este primer informe, el discurso del “desastre heredado” se agotó. Lo que venga ahora es y será asunto de Quirino Ordaz. De él depende qué clase de Gobernador quiere ser. Y la coyuntura es sencilla: ¿quiere administrar el poder o aspira a construir un legado auténtico?
 
Librero.
 
Y a propósito de la importancia del buen periodismo, va un clásico: “All the President’s Men” (Simon & Schuster, 2012) de Carl Berstein y Bob Woodward. El libro que cuenta al detalle el escándalo de Watergate. En Estados Unidos les alcanzó para tumbar a un Presidente, en México el reportaje de la Casa Blanca sirvió para correr a Carmen Aristegui.
 
Aviso.
 
El próximo martes, el Gobernador Quirino Ordaz estará en Noticiero Noroeste a las 8.30 am vía Facebook Live. Conéctate, conversa, pregunta. Te esperamos.