Alexander quiere ser soldado como su papá

"Alexander y sus compañeros de escuela realizaron un recorrido por una exhibición que hicieron elementos de la Novena Zona Militar"

Apenas cursa el primer año de primaria y Alexander ya sabe a qué quiere dedicar su vida: quiere ser soldado como su papá.

"Porque hay que cuidar a todos por igual", explicó el pequeño.

 - ¿Qué es lo que más te gusta de lo que hace tu papá?

 Viajar y conocer el bosque.

 Con motivo del 105 aniversario del Ejército Mexicano, Alexander y sus compañeros de escuela realizaron un recorrido por una exhibición que hicieron elementos de la Novena Zona Militar.

Alexander y sus compañeros tuvieron la oportunidad de ver de cerca diversos vehículos que utiliza la milicia en operativos.

Cada parte del recorrido estaba compuesto por elementos que son utilizados para diversas acciones, como telecomunicaciones. En ese módulo se exhibieron radios matra y se explicó a los niños cómo era su funcionamiento.

También se les mostró elementos que utilizan en el uniforme, como botas, casco, cantimploras y chalecos antibalas.

En uno de los módulos se expuso parte del armamento que utilizan las Fuerzas Armadas. Ahí Alexander y sus compañeros pudieron tocar las armas, saber el nombre y calibre de cada una.

La ambulancia militar fue una de las paradas más interactivas para los pequeños, pues pudieron tocar el equipo y algunos aprendieron que los militares también realizan labores de primeros auxilios y medicina cuando sus compañeros lo necesitan.

Dos perros pastor belga se llevaron las ovaciones de Alexander y sus amiguitos. Los canes hicieron demostración de agilidad librando varios obstáculos y rastrearon bolsas en cajas, exponiendo cómo son los operativos antidrogas con perros.

Desde las alturas cuatro soldados les mostraron a los pequeños tácticas a rapel, los nudos que se realizan en el cabo, y el equipo necesario para poder llevarlo a cabo.

También les explicaron las situaciones en que pueden aplicarse dichas tácticas. Los soldados bajaron por la pared de un edificio de tres pisos, ante la mirada atónita de los niños.

Los pequeños se mostraron soprendidos y atentos en todo momento, para Alexander fueron las armas que les mostraron lo que más le impresionó.

Su vocación de servicio y las armas no son los únicos factores que tomó en cuenta el niño para decidir ser militar, sino también el color verde del uniforme, porque es su color favorito.

Algunos de los compañeritos de Alexander explicaron que no conocían a los soldados, y otros dijeron que los habían visto algunas veces en la calle arriba de patrullas, y comentaron que la labor de ellos era ir a la guerra.

"Que no les teman porque son buenos", dijo Alexander, pues se percató que algunos niños les temen.