Hace 13 años que padecen fallas eléctricas en Villa Fontana, en Culiacán, por un transformador insuficiente
Continuamente los vecinos padecen daños en electrodomésticos, televisores y conexiones eléctricas por una energía inestable
Hace 13 años que los vecinos de la colonia Villa Fontana, en Culiacán, padecen daños en electrodomésticos, televisores y conexiones por un transformador que suministra a más hogares de los contemplados en un inicio.
Argelia Bravo, vecina que ha vivido en el fraccionamiento por al menos 30 años, explicó que el problema está en que viviendas y negocios fueron asentándose alrededor de las primeras 14 casas sin la instalación de un nuevo transformador.
Esta situación, dijo, ha provocado que la electricidad sea cada vez más inestable, afectando la economía de las familias y poniéndolos en riesgo.
Por ello, han llevado múltiples oficios a la Comisión Federal de Electricidad para solicitar la instalación de un nuevo transformador, así también a la Procuraduría Federal del Consumidor y a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros.
“El primer escrito para la Comisión fue generado en 2015, nos lo hicieron ‘ojo de hormiga’, se retomó el trámite el año pasado, dijeron que nos iban a venir a cambiar el transformador, que sí había en existencia”.
“Vinieron, checaron, el ingeniero que vino dijo que ‘no’, se puso bastante tajante, pusieron cinta negra, se retiraron y nos quedamos igual” relató.
Hoy en día, el mismo transformador que fue instalado desde hace tres décadas suministra a por lo menos 32 viviendas más y cinco negocios: uno dedicado a la fabricación de cableado, un taller mecánico, dos salones de eventos y una vidriera.
“Alrededor de 37 inmuebles que están colgados ilegalmente, porque son terrenos irregulares. Me consta, yo ví las cuadrillas de CFE, les pusieron su medidor y ya bien contentos pasaron el billete”.
Argelia relató que en la última ocasión que acudieron trabajadores de la dependencia federal, les dijeron que el transformador funcionaba correctamente; no obstante, los vecinos han tenido que instalar reguladores para evitar más pérdidas económicas.
A cada vivienda le ha costado esta problemática alrededor de 100 mil pesos, pues hay quienes han perdido portones, licuadoras, refrigeradores, y demás aparatos electrónicos.
Durante la temporada de lluvias y calor, la inestabilidad de la energía eléctrica se acrecenta, pues aumenta la carga con el funcionamiento de los aires acondicionados en las viviendas.
“Ya se han dado cuenta como estuvo esta isoterma tan dura de una semana, donde teníamos que estar todo el día con aires, no sólo yo, las catorce casas más las del fondo. Imagínate tanto aire acondicionado, porque no tenemos uno, son dos o tres”.
“Cuando viene la lluvia, se humedece y seguimos con el aire, que en la primera línea del transformador ‘parapetaron’ con cinta negra, que quieras o no se va mojando, la va desgastando y entonces la va a volver a chamuscar, o revienta aquel o nos revienta a nosotros”.
Hasta el momento, no han acudido ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos por la violación a su derecho de una vivienda digna, asimismo, tampoco han buscado una revisión de Protección Civil.
Sin embargo, están buscando emprender acciones legales, para que a partir de un amparo, la CFE solucione la problemática.
Hace un año, los vecinos expusieron su demanda a Noroeste, hasta el momento, el Gobierno no ha atendido su solicitud.