Lanzan en Sinaloa operativo contra clínicas privadas de belleza

"Registra Coepriss múltiples denuncias por complicaciones en cirugías estéticas"

Verse bien puede costarle caro, incluso, dejarle secuelas.

Por ello, la Comisión Estatal para la Protección contra los Riesgos Sanitarios de Sinaloa ha implementado un "marcaje personal" en las clínicas de estética privadas, tras denuncias ciudadanas que alertan complicaciones médicas en pacientes.

Jorge Alan Urbina Vidales, titular de la Coepriss, aseguró que esta actividad debe regularse en todo el estado.

“Derivado de las múltiples denuncias por complicaciones médicas relacionadas con la modificación estética del cuerpo humano, que incluye procedimientos de mejora en apariencia, pigmentaciones y actos quirúrgicos realizadas por médicos que se ostentan como especialistas en medicina estética avalados por una cédula de maestría, la Coepriss realiza visitas de verificación a las clínicas del sector privado", expuso

Esto, precisó, en búsqueda de médicos que realizan dichos procedimientos y que no cuentan con la documentación de acuerdo como lo marca la normatividad vigente.

Refirió que en la Ley Reglamentaria del Artículo 5 Constitucional, relativo al ejercicio de las profesiones en el Distrito Federal, se señala en el artículo 2 que las leyes que regulen campos de acción relacionados con alguna rama o especialidad profesional, determinarán cuáles son las actividades profesionales que necesitan título y cédula para su ejercicio.

Urbina Vidales explicó que La Ley General de Salud, en los artículos 272 Bis y 272 Bis-1, establece que para practicar cirugía plástica, estética y reconstructiva relacionados con cambiar o corregir el contorno de diferentes zonas o regiones de la cara y del cuerpo y realizar actos médico quirúrgicos de especialidad, sólo deberán ser atendidos por profesionales de la salud especializados en dicha materia.

Añadió que una vez verificado que en el establecimiento se lleven a cabo procedimientos referidos en el párrafo que antecede, deberá solicitarse al responsable sanitario y profesionistas que en el mismo laboren, las cédulas profesionales que amparen el ejercicio de la profesión de todos y cada uno de los médicos que lleven a cabo este tipo de intervenciones quirúrgicas.

En caso de que no se acredite lo anterior, se deberá proceder a la suspensión total del establecimiento.