Mal olor, basura y daños en infraestructura; así se encuentra la Isla de Orabá en Culiacán

Roberto Torres
10 noviembre 2021

El césped y los arboles del lugar son podados con frecuencia, pero el resto de los espacios permanecen en deterioro

Pese a que la Isla de Orabá es un área natural protegida, así como un espacio declarado por el Ayuntamiento como santuario de la iguana verde, actualmente, algunas zonas del lugar registran mal olor, cúmulos de basura y daños en su infraestructura.

El mal olor puede detectarse desde el tramo de Paseo Niños Héroes bajo el puente Juan de Dios Bátiz, esto se debe al brote de aguas negras bajo el puente colgante. La suciedad de estos fluidos también han provocado que el fango invada varios metros de la ciclovía.

A las orillas del Río Tamazula, a un costado del viejo malecón se pueden ver cúmulos de desechos, tales como: envases desechables, vasos de unicel, pedazos de cartón, ropa y hasta una hielera para fiestas, lo que provoca que el riachuelo de un aspecto sucio.

Pese a que el personal del Parque Las Riberas realiza podado de césped y de arboles con frecuencia, en algunos espacios de la isla se pueden encontrar dispersadas latas de cerveza o botellas de refresco, mientras que las parrillas de concreto se mantienen con restos de comida y hojas secas de árbol.

Tanto el parque de la isla como el río son iluminados por unas lamparas que se encuentran instaladas en la estructura del puente Juan de Dios Bátiz, sin embargo, algunas luminarias están a punto de desprenderse, mientras que otras permanecen colgadas.

La rampa de descenso del puente colgante que conecta el malecón con la isla cuenta con un boquete y con algunas tablas desprendidas o mal aseguradas, lo que representa un riesgo para la integridad del transeúnte que utiliza la estructura.

Tanto bancas como mesas de concreto se encuentran en deterioro, ya que estos se encuentran despintados y algunos están a punto de colapsar; además, las áreas de juegos se mantienen oxidadas y a los columpios les faltan piezas.

Esta situación en la que se encuentra la isla ha provocado la disminución de visitantes, pues tales fallas imposibilitan la convivencia familiar.

Durante la pandemia, la falta de visitantes ayudo para repoblar la iguana verde, pero los espacios en deterioro, han alejado a la ciudadanía.