Policías ahora ofrecen transferencias bancarias como método para pagar ‘mordidas’

Daniela Flores
17 abril 2024

Según la encuesta de Seguridad Pública Urbana del INEGI 2023, casi el 50 por ciento de la población que tuvo contacto con autoridades de Seguridad Pública declararon haber sufrido al menos un acto de corrupción

Días atrás, Roberto y Mariana habían comprado un carro de segunda mano, no lo quisieron mover del lugar en el que se hallaba hasta contar con un permiso para circular sin placas, llegado el día y con la hoja válida en mano salieron a su domicilio con 300 pesos en la bolsa, no había nada más que pagar, hasta que policías de estatales los detuvieron.

Mariana recuerda que bajaron a Roberto del coche y le pidieron que abrieran la cajuela para inspeccionar el contenido.

“Se lo llevaron para la parte de la cajuela (a Roberto), le pidieron que abriera la cajuela para revisarla y creo que también le dijeron que se sacara todo lo que traía en los bolsillos y creo que traía 300 pesos en la bolsa entonces les dijeron que el permiso que traían no era válido que porque el QR no se leía”, señala Mariana.

Relata que por parte de los policías se esforzaban en armar excusas para asustarlos y confundirlos y así condicionarlos a acceder con el pago de una ‘mordida’.

“Realmente el QR no lo leía bien porque el teléfono con el que lo escaneaban no servía porque yo lo escaneé desde la primera vez y si te mandaba a la página oficial donde se hizo el permiso, entonces, estaba como que buscando pretextos para espantarlo”.

Debido a las circunstancias jerárquicas, la pareja narra cómo los policías estatales tiraron la primera oferta, de 3 mil pesos para dejarlos ir. A pesar de que Roberto les explicaba que no tenía tanto dinero, éstos ofrecieron un método moderno de pago: transferencia bancaria.

“El colmo de todos los colmos es que ni siquiera traíamos efectivo para completar lo que pidieron al final, le quitaron 2 mil pesos y se los transferimos, se los transferí de mi aplicación del banco a una tarjeta a nombre de una mujer, quién sabe de quién sea”, cuenta Mariana.

Según datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, en el segundo semestre de 2023, 13.7 por ciento de la población de 18 años y más tuvo contacto con autoridades de seguridad pública. De estas personas, 45.8 por ciento declaró haber sufrido, al menos, un acto de corrupción por parte del personal perteneciente a dichas autoridades.

Un caso similar es el de César Uriarte, profesor de universidad, quien cuenta que de forma arbitraria mientras caminaba por el parque con sus perros, fue detenido por policías.

De reojo un policía se percató de la aplicación bancaria en su celular sentenció la oferta y el método para pagar.

“Me quieren llevar y no me dejo, ya como a la media hora de estar ahí accedí para que me dejaran ir pero me miraron la banca (cuenta bancaria) y ellos me dijeron lo que les depositara (... )Me quitaron como 2 mil pesos”, recuerda.

A su vez, los resultados de la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental, encargada de recabar datos sobre la incidencia de actos de corrupción al realizar pagos, trámites, solicitudes de servicios públicos y otro tipo de contactos con autoridades, estimó que en 2023 la percepción de este fenómeno entre la población fue de 83.1 % quien consideró frecuentes estos actos.

En cuanto a la tasa de población que tuvo contacto con alguna persona servidora pública y experimentó al menos un acto de corrupción, Sinaloa ocupa un cuarto lugar, situándose por encima de la media nacional, con 17 778 por cada 100 mil habitantes.

En ese sentido, el trámite con mayor porcentaje de experiencias de corrupción durante 2023 fue el contacto con autoridades de seguridad pública, con 59.4 por ciento. Siguió el trámite para abrir una empresa, con 27.5 por ciento.

En promedio, el costo por víctima de actos de corrupción fue de 3 mil 368 pesos, ocupando Sinaloa un tercer lugar con 5 mil 654 pesos.

“A mí me asombró porque antes no me había tocado que pidieran hasta por transferencia ya ni siquiera te detienes de decir no traigo efectivo lo que quieren es sacar dinero (...), ahora querían más de lo que traíamos entonces querían sacar más y como vieron que no traía más le dijeron que le transfiriera, hasta tarjeta le dieron”, enfatizó Mariana.