Protestan estudiantes de Odontología en la UAS contra cuota de materias clínicas

Frente a la clínica odontológica que está en Ciudad Universitaria, el grupo de alumnos señaló que este cobro extra se realiza por el mismo personal y se paga solamente en efectivo en la misma clínica

Estudiantes de la Facultad de Odontología de la Universidad Autónoma de Sinaloa realizaron una manifestación en rechazo al cobro por el derecho de entrar a las materias clínicas, que sería un pago extra a los rubros que contempla la inscripción.

En la carrera de Odontología, las materias clínicas son los espacios prácticos donde los alumnos atienden a pacientes reales bajo supervisión, requisito necesario para acreditar el curso.

Frente a la clínica odontológica que está en Ciudad Universitaria, el grupo de al menos 30 alumnos señaló que este cobro extra se realiza por el mismo personal y se paga solamente en efectivo en la misma clínica.

La alumna Alicia explicó que la cuota no es única, sino que se paga por cada clínica en la que estén inscritos durante el semestre.

“Son 600 pesos por clínica, yo tengo tres clínicas en este momento, entonces son mil 800 en este semestre”, criticó.

Agregó que la inscripción también subió de mil 200 a 2 mil 500 pesos, lo que se suma a los costos de materiales y tratamientos.

Comentó que 150 firmas fueron entregadas en Rectoría para rechazar el cobro, pero hasta el momento siguen sin obtener respuesta.

Por su parte, Michelle, estudiante de quinto grado, denunció presiones del personal docente.

Además, criticó la postura de algunos docentes que minimizan las quejas.

“Los profesores nos dicen: ustedes son libres de manifestarse pero puede que haya represalias y eso realmente es meternos miedo para que nosotros no queramos hablar y decir las cosas que han pasado”, apuntó.

“Hay muchos profesores que discrimina mucho en que esto es una carrera cara y dicen que si ya sabían que era una carrera cara para qué nos metemos”, dijo.

Durante la protesta, los manifestantes intentaron colocar una lona alusiva a su inconformidad en la entrada de la clínica, pero personal de la facultad les dijo que obstruía el paso a los pacientes y que si tenían quejas, debían acudir directamente con el director.

Tras ello, los estudiantes se dirigieron a buscarlo; sin embargo, al llegar, el secretario administrativo, Cipriano, les negó el paso y argumentó que el director no se encontraba porque estaba ocupado en asuntos propios de su función.