Sazón y condimento de Altata

Martín González
08 noviembre 2015

"La promotora incansable de la imagen y la gastronomía de la bahía platica sus anhelos de que mejore el puerto"

CULIACÁN.- En la preparación de pescados y mariscos La Güera es toda una institución en la bahía de Altata.
Comensales de la talla del ex Presidente Vicente Fox Quesada y personajes de la farándula han deleitado el paladar con las viandas de su cocina.
Menos conocida por su nombre de pila, Alma Rosa Alfaro, promotora incansable de la imagen y gastronomía de la bahía, habla de sus anhelos y deseos para el que fuera el primer puerto de altura de Sinaloa, punto de partida del Tacuarinero en el nacimiento del Siglo 20.
La Güera absorbe la vida en un respiro y mira el horizonte, un horizonte que espejea con los rayos oblicuos del Sol de la mañana. El salitre de la atmósfera que se pega al cuerpo y el graznido de una gaviota pincelan el hábitat costeño.
"Quisiéramos que Altata fuera otro, con ese malecón que dicen que nos van a mandar, una buena marina para que todos los pescadores reúnan sus pangas y que tengamos una playa limpiecita", suelta.
Con estudios de comercio, jamás ejerció el secretariado por una sola razón: no le gusta que la manden.
"Jamás trabajé, soy secretaria... Cómo voy a trabajar. No. Yo estoy acostumbrada a mandar, no a que me manden".
Su actitud carece de pedantería. Así es ella. Espontánea, sincera, muy inquieta.
--¿Por qué La Güera?
"La Güera porque era una güerita muy inquieta, muy pecosilla; siempre La Güera, La Güera. De los cinco que somos, yo soy la más inquieta".
De esa inquietud nacieron Mariscos La Güera y Restaurante Bahía.
De su comedimiento en el "negocito" en el que su madre vendía tacos, tostadas y gorditas, de su comedimiento de vender en la playa las tortillas que su madre hacía.
"Tenía como 12 años cuando salió la oportunidad de comprar donde está el restaurante Bahía. Ahí empezamos con una enramadita, vendiendo nada más pescado frito, albóndigas de camarón y sopa de arroz. Con el tiempo vendimos almejas, patas, pulpo y filete. Ahí fuimos para arriba".
Casada y madre de tres hijos que siguen sus pasos, La Güera agradece al "charco" haberle dado lo que tiene.
"No soy rica, tengo para estar viviendo. Pero de mí dependen dos familias. Esta güera tiene dos hermanos y de los mariscos La Güera nos mantenemos dos familias".
Tomatera de corazón, dice, nunca se pierde un partido de su equipo en el Ángel Flores.
En la vida de Alma Rosa hay un hecho que la ufana y que le acaricia el ego. La deferencia de Vicente Fox Quesada para con ella en la recepción ofrecida al mandatario durante la inauguración del puente a Nuevo Altata en 2003. La única marisquera que atendió al Presidente.
Lo saludó y se fotografió con él. El guanajuatense le hizo mandar las fotos en un sobre lacrado de la Presidencia de la República, que aún conserva y presume.
"Yo fui la estrella. Estaba tan grandote y yo tan chiquita que buscaba una silla para alcanzarlo. Me dijo: 'Yo me encargo que esas fotos le lleguen a usted'. Mandó como 15 que ahí las tengo".

"Quisiéramos que Altata fuera otro, con ese malecón que dicen que nos van a mandar, una buena marina para que todos los pescadores reúnan sus pangas y que tengamos una playa limpiecita"

Alma Rosa Alfaro, La Güera
Restaurantera de Altata