Sillas vacías en vísperas de Navidad: el doloroso recordatorio de Sabuesos Guerreras ante la crisis de desapariciones

Ubaldo Robles
23 diciembre 2025

Al cumplir ocho años realizando este acto previo a la Navidad, María Isabel Cruz Bernal, presidenta del colectivo, señaló que este año han atendido entre 3 mil y 3 mil quinientas solicitudes de búsqueda

Por octavo año consecutivo, el colectivo Sabuesos Guerreras llevó a cabo su emblemática actividad de colocar sillas vacías en la banqueta de La Catedral Basílica de Nuestra Señora del Rosario previo a la Noche Buena, un acto que busca visibilizar la ausencia de miles de personas en Sinaloa.

María Isabel Cruz Bernal, presidenta de la organización, señaló que este año se colocaron 60 sillas, una cifra limitada únicamente por la falta de presupuesto, pues cada silla representa un costo de 20 pesos.

“Si todas hiciéramos esto y juntáramos todas las sillas de los 18 mil desaparecidos en todo el Estado, pues no nos alcanzaría la Avenida Obregón completa para poner tantas”, señaló Cruz Bernal.

Cruz Bernal destacó este martes 23 de diciembre que la actividad simboliza un mensaje directo a las autoridades y al mundo de que las personas desaparecidas les hacen falta en casa y los seguirán buscando.

La activista informó que han localizado entre 45 y 50 personas sin vida en lo que va del año y el colectivo ha servido como un referente crítico para las familias, atendiendo entre 3 mil y 3 mil 500 solicitudes de búsqueda en el presente año y a pesar de los esfuerzos, las labores de campo se han visto obstaculizadas por la situación de inseguridad en la región.

“Paramos las búsquedas por la violencia porque tampoco somos heroínas, tampoco queremos exponernos”, afirmó.

Respecto al perfil de las víctimas, Cruz Bernal detalló que la mayoría siguen siendo hombres jóvenes, aunque alertó sobre un incremento preocupante en la desaparición de mujeres.

La presidenta de Sabuesos Guerreras también denunció la falta de respeto hacia los murales donde se colocan fichas de búsqueda y señaló que, incluso integrantes de otros colectivos, han arrancado fotografías.

“Esto no es una competencia. Si nos uniéramos, avanzaríamos más”, expresó.

María Isabel arremetió contra la lentitud de la Fiscalía en los procesos de identificación humana y a pesar de que las autoridades aseguran avances mediante colaboraciones internacionales y huellas dactilares, la activista señaló que existen familias que deben esperar semanas para recibir a sus seres queridos, aun cuando ya han sido identificados por rasgos físicos, tatuajes o vestimenta.

Denunció que hay una fila de espera sobre la saturación en los servicios forenses y en el ámbito personal, compartió que ella misma continúa a la espera de resultados de una prueba de ADN mitocondrial para su hijo, la cual tuvo que ser reenviada tras no realizarse los estudios solicitados inicialmente.