Álvaro Morata brilló, anotó tres goles y Atlético Madrid goleó a Juventus, en duelo amistoso

Noroeste/Redacción
07 agosto 2022

Los Colchoneros cierran su pretemporada con un apabullante triunfo de 4-0 sobre la Vecchia Signora

Ante el Juventus, el equipo que lo pretende, con el que ha jugado los dos últimos cursos, Álvaro Morata remarcó su imponente momento, goleador en dos ocasiones en el primer tiempo y crucial en el tercer tanto, para lanzar a toda velocidad al Atlético de Madrid hacia el inicio de LaLiga del lunes 15 de agosto, con un sobresaliente pleno de victorias, la última incontestable ante un rival de la Liga de Campeones, al que sobrepasó desde el principio e incluso falló un penalti, parado por Szczesny a Joao Félix (0-4).

El Atlético está listo. Su duelo en el Centro Deportivo Continassa, a donde se trasladó el partido por las dudas de seguridad que generaba el encuentro en Tel Aviv debido a la escalada de violencia en la zona, reafirmó a un equipo que comenzó su preparación hace menos de un mes, entró en juego hace una semana y media y se siente fuerte, rotundo y preparado para competir por todo. Es la exigencia. Sin excusas ni términos medios.

El conjunto rojiblanco ya no se conforma sólo con entrar en la Liga de Campeones en cada uno de los últimos diez años. Es el objetivo del club. Pero al equipo no le basta ‘sólo’ con eso. Ni la pasada temporada, cuando se separó demasiado pronto de competir por el título, ni la actual, en la que se propone de nuevo el desafío de ganar todo lo que pueda. Son ocho títulos en la era Simeone. Quiere más el Atlético. Y ha diseñado un bloque para conseguirlo.

Morata está en plena reivindicación. Tiene muchísimo que decir en este Atlético, si finalmente se mantiene en él. Su pretemporada no admite dudas. Anotador el pasado jueves en el Trofeo Ramón de Carranza ante el Cádiz, pero también notable en todos y cada uno de los aspectos del juego que se exigen a un delantero, el goleador de la selección española remarcó sus cualidades en la puesta en escena contra el Juventus, el equipo que lo pretende y al que batió a los 10 minutos, con un movimiento muy propio de su perfil.

Su desmarque perfecto entre los centrales, beneficiado por el desajuste de Danilo en el lateral derecho, fue la invitación que necesitaba Joao Félix para entregarle el pase que promovió el 0-1, transformado de primeras, con la izquierda, con una buena definición por Morata. El gol surgió de un contragolpe y una conducción elegante de Joao, un futbolista cuyo momento actual insiste en que puede ser lo que quiera. Necesita constatarlo del todo.

Una recompensa para el Atlético, que se siente bien, competitivo, preciso, desbordante, incisivo y contundente en el área, el factor más concluyente e incontestable del futbol para Simeone. Lo fue el equipo rojiblanco contra el Numancia (0-4), contra el Manchester United (0-1), contra el Cádiz (1-4) y este domingo contra el Juventus (0-4). El resultado son cuatro victorias, trece goles a favor y uno solo en contra. Está a punto para competir.

Porque su evolución física también fue visible. Su ritmo ya aparentó competición, como cualquiera de sus individualidades, como Joao Félix, Morata, Koke al mando en el medio campo, Marcos Llorente, Lemar, Saúl, Savic, Reinildo, Molina, Witsel de nuevo como central y protagonista de otra ocasión a balón parado aún con 0-0 en el marcador. Ya con 0-1, Koke conectó una volea preciosa que no fue gol por la estirada también magnífica de Szczesny y Joao Félix falló un penalti, parado de forma meritoria por el guardameta antes del descanso.

La acción que originó la pena máxima, igual que otras tantas que desarrolló en el primer tiempo, confirmó el punto en el que está y mejor se mueve el Atlético; en el robo de balón, la salida rápida al ataque, las combinaciones veloces y la verticalidad que reclama Simeone en cada ataque, como la que personificó de nuevo Morata, que superó en la pugna cuerpo a cuerpo a Bonucci en el medio campo, corrió, condujo el balón y se plantó en el área contraria, donde quebró a Bremer con la izquierda, con la que remachó el 0-2. Minuto 42.

No tuvo ni una sola ocasión Vlahovic, apenas se vio a Di María, en ningún momento amenazó el Juventus la portería de Ivo Grbic, el sustituido de Oblak, hasta el minuto 56, hasta que Miretti lo probó con un disparo raso, cuando el partido ya iba 0-2, cuando el conjunto italiano elevó la intensidad y su manejo de la posesión, cuando el Atlético se enfrentó a otro duelo que también ganó, porque no sólo no recibió ningún daño en su portería, sino que además agrandó su ventaja, en una falta lanzada por Lemar que no alcanzó a peinar con la cabeza Morata (al menos, él gesticuló que no la había tocado), y terminó en el 0-3. Aún pudo marcar Carrasco el 0-4, que lo logró Cunha al final.