Oviedo no rompe la sequía y empata sin goles en el debut de Guillermo Almada
El técnico uruguayo estrenó banquillo en el Carlos Tartiere, pero el equipo sigue sin ganar y cierra el año en zona de descenso
El estreno de Guillermo Almada al frente del Real Oviedo no pudo cambiar la dinámica de un equipo que acumula ya casi tres meses sin conocer la victoria.
En el Carlos Tartiere, los asturianos firmaron un nuevo empate sin goles, esta vez ante el Celta de Vigo, en un partido donde los locales fueron más incisivos en la segunda parte, pero se toparon con la seguridad del guardameta rumano Ionut Radu.
El resultado deja un sabor amargo en Oviedo, que ha encadenado cuatro partidos consecutivos en casa con idéntico marcador (0-0) y cierra el año en la penúltima posición de la Primera División, con apenas 11 puntos. El contexto deportivo se suma al terremoto social que atraviesa la entidad tras las últimas decisiones del Grupo Pachuca, propietario del club.
Por su parte, el Celta se marcha con un punto que lo mantiene cerca de los puestos europeos, aunque sin lograr dar el salto definitivo en la clasificación. El conjunto gallego mostró orden y resistencia, pero careció de profundidad para aprovechar las dudas de su rival.
El debut de Almada, que llegó con la misión de reactivar a un equipo en crisis, deja claro que el reto será mayúsculo: recuperar confianza, romper la sequía goleadora y sacar al Oviedo de la zona roja de la tabla.