Fibromialgia
Amigo lector de Noroeste, este 24 de diciembre es común que se diga hoy es Noche Buena y mañana es Navidad. Si prende su celular y ve las redes sociales, mensajes, todo lo que sea comunicación, está inundado de mensajes alusivos a la Navidad y Año Nuevo, lo que está bien, pero usted sabe qué se festeja en Navidad (porque puede ser que no coincida la fecha, pero esta se tomó para este celebración).
Bueno, pues, no son los excesos (fiesta, borrachera, etc., etc.), sino que nos recuerda el nacimiento de Jesucristo, y este según la historia, no nació con lujos ni excesos, sino que su nacimiento fue en un pesebre (corral de animales), eso cuenta la Biblia y a esta hay que creerle por fe.
Luego entonces por qué usted y yo somos tan dados a excesos en esta época, eso quiere decir que no celebramos este acontecimiento histórico, o, a lo mejor sí, pero allá, muy allá en el fondo, cuando debe ser lo primero que debemos tomar en cuenta en esta festividad. Pero bueno, cada quien festeje según sea su criterio, solo no se encuete ni despierte con el malestar de cabeza por lo que hizo. Solo acepte a Dios en su vida y en su casa.
Las fibromialgias es un padecimiento crónico, también se le puede catalogar como una enfermedad crónica que se caracteriza por dolor músculo esquelético generalizado con una exagerada hipersensibilidad en múltiples aéreas del organismo y puntos predefinidos, sin alteraciones orgánicas demostrables. También se le define como un conjunto de síntomas que incluyen dolor y sensibilidad generalizados. Difiere de la artritis en que es un dolor en los músculos y tejidos cercanos a las articulaciones y no en las articulaciones entre sí. Asimismo, a diferencia de la artritis, no ocasiona inflamación articular ni muscular, ni destruye las articulaciones ni pone en peligro los órganos internos. Simplemente causa dolor.
La fibromialgia, como su nombre lo indica, es el dolor de las fibras musculares. Hasta la fecha no existe una causa que la defina como tal, lo que sí se ha estudiado y demostrado que es más común el sexo femenino, aunque esto no hace libre al sexo masculino, esta alteración es más frecuente después de la tercera década.
El síntoma principal de la fibromialgia es el dolor que puede ser generalizado. Éste puede ser profundo o sensación de ardor, se presentan otros síntomas asociado a la fibromialgia tales como fatiga crónica, problemas digestivos, dificultad para dormir, entumecimiento, rigidez, hormigueo, dolor de cabeza, sensibilidad a los cambios climáticos y de temperatura, mareos, cambios de humor.
Toda esta sintomatología se debe tomar en cuenta en pacientes que asisten al profesional de la medicina y “están bien” mientras toman el analgésico, pero en cuanto lo suspenden, vuelve la sintomatología, de aquí la importancia del diagnóstico de certeza.
Dado que es común que estos signos y síntomas se presenten juntos y a que no se han encontrado causas específicas, la fibromialgia se considera más un síndrome que una enfermedad. Además, debido a que los síntomas son muchos y variados y no siguen un patrón consistente, la fibromialgia puede ser estresante lo mismo que dolorosa. Puede presentarse una exacerbación que cederá después, pero por lo general la afección no desaparece por completo. Aunque la fibromialgia tiende a permanecer con uno, no es progresiva ni amenaza la existencia.
Es probable que un sinnúmero de factores contribuyan al desarrollo de la fibromialgia. Pero una teoría llamada “sensibilización central” sostiene que las personas con este padecimiento poseen un umbral menor para el dolor, debido a una mayor sensibilidad cerebral a las señales de dolor. Otros factores pueden incluir trastornos del sueño, lesiones, anormalidades del sistema nervioso simpático y cambios en el metabolismo muscular.
Diagnóstico y tratamiento. El diagnóstico normalmente se realiza por la clínica, se revisan antecedentes del paciente y se pueden mandar estudios clínicos, pero normalmente todos están bien. El tratamiento siempre va a ser sintomático.