María aprende de su padre pescador

"A sus 12 años, comenzó a practicar el tae kwon do de alto rendimiento, lo que le obligó a dejar su casa por largas temporadas"

BEIJING (EFE)._ La taekwondoína mexicana María Espinoza coronó con el oro olímpico una carrera desarrollada bajo los preceptos que le enseñó su padre Marcelino, un humilde pescador de camarones de un pueblo del estado mexicano de Sinaloa.
"La vida del pescador siempre tiene sus altas y sus bajas", le dijo Marcelino Espinoza a su hija María del Rosario, cuando a sus 12 años, comenzó a practicar el tae kwon do de alto rendimiento, lo que le obligó a dejar su casa por largas temporadas.
Ocho años después, a los 20 años, y con el consejo siempre en su mente, María Espinoza conquistó la medalla de oro en un combate contra la noruega Nina Solheim, en la final de la categoría de +67 kilos del tae kwon do.
La medalla olímpica se suma al título de campeona del mundo ganado en 2007 y representa el mejor momento para esta mexicana procedente de una familia humilde de un pueblo pesquero del noroeste de México.
Su padre, Marcelino, trabaja en un barco camaronero, la principal actividad económica de la zona de Guasave, unos mil 250 kilómetros al noroeste de México, y la madre, Felícitas, se dedica al hogar.
Como muchas personas de Sinaloa, María Espinoza gusta de la música de banda, típica de esta región y que consiste en una agrupación con instrumentos como el tambor, la tuba y la trompeta y cuyo sonido le acompaña en sus entrenamientos.
La medallista mexicana practica el tae kwon do desde que tenía 5 años y cuando tenía alrededor de 10 años solía combatir con niños, no a nivel competitivo pero sí en combates que le hicieron ser más tolerante a los golpes y más ruda, lo que le hace una mejor peleadora.
Creció al mismo tiempo que la llamada Olimpiada Nacional de México, que descubre nuevos talentos deportivos y los encauza y que llevó a María a los 12 años al Centro de Alto Rendimiento de La Loma, en el central estado de San Luis Potosí.
Llegó a la capital mexicana a vivir en la villa de atletas que tiene la Comisión Nacional del Deporte y los frutos comenzaron en 2003, cuando ganó el título panamericano juvenil y en el 2007 se proclamó campeona del mundo en -72 kilos.
El tae kwon do también le ha abierto la posibilidad de estudiar y actualmente está matriculada en la carrera de administración de empresas de la Universidad del Valle de México, como parte de un programa becas para deportistas.

ERA UNA DESCONOCIDA
María Espinoza, quien hace 2 años era una desconocida en el deporte mexicano, se confirmó con su triunfo como la mejor deportista olímpica mexicana de la historia, al ganar una medalla de oro que unió a su título mundial y al de los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro en el 2007.

ES LA NÚMERO 12
La medalla de María fue la duodécima de oro de México en Juegos olímpicos y la tercera del país en Beijing, luego del título de tae kwon do de Guillermo Pérez y del bronce ganado por Paola Espinosa y Tatiana Ortiz en los saltos sincronizados desde 10 metros.

5
años tenía cuando inició en este deporte

2003
logró el título panamericano juvenil

FICHA TÉCNICA


Nombre: María del Rosario Espinoza
Fecha de nacimiento: 29 de noviembre de 1987
Lugar de nacimiento: Guasave, Sinaloa
Altura: 1.73 cm
Peso: 69 kilogramos
Deporte: Tae kwon do
Estudios: Administración de Empresas
Su camino estaba decidido y en 2002 ratificó que su destino era el tae kwon do.
A pesar de sus 20 años, María del Rosario Espinoza ha tomado el liderazgo del tae kwon do femenil mexicano y ser Campeona Mundial en Beijing 2007 lo ratifica.
Pero eso no ha sido todo su andar, sino que en el mismo 2007 se adjudicó la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Brasil.
Por si este año fuera poco, también fue nombrada Premio Nacional del Deporte 2007.
No corrió con la misma suerte en el Campeonato Mundial de Madrid 2005, puesto que se ubicó en el quinto puesto.
Antes de dedicarse a fondo al tae kwon do, la joven de 20 años también practicó el voleibol, atletismo y el basquetbol.