Jesús Manuel con devoción ha dedicado 30 años de su vida a bajar a la Virgen del Rosario

Desde hace tres décadas, Jesús Manuel Padilla Ríos ha sido el responsable de descender a Nuestra Señora del Rosario en cada cambio de vestimenta y en su tradicional romería

EL ROSARIO._ Como un privilegio calificó Jesús Manuel Padilla Ríos el poder desde hace 30 años ser el encargado de descender a Nuestra Señora del Rosario tanto para los cambios de vestidos como para su tradicional romería, acto el cual, afirma, vive con total devoción.

Aunque este acto tiene lugar tres veces al año, se mantiene de cerca sirviendo en el santuario mariano al ser encargado del mantenimiento de los jardines.

“Yo soy el encargado de bajar a nuestra santísima madre, tengo aproximadamente cerca de 30 años bajando a la virgen”, expuso.

Su labor refirió que es importante para él y su familia al ser devotos de esta advocación patrona de los rosarenses.

“Al momento de estarla bajando le doy gracias por todas las bendiciones que le da a mi familia y a todo el pueblo de Rosario”.

Relató que la encomienda de bajar a la virgen del retablo cubierto en hoja de oro la recibió el ahora finado párroco Leoncio Macías.

“Para mí es un privilegio y me siento muy orgulloso de participar en esta (celebración), de bajar a la virgen”.

Argumentó que su orgullo proviene de la satisfacción de poder aportar su granito de arena para que la virgen luzca para todos aquellos que peregrinan hasta su templo o aquellos que atestiguan su recorrido.